No es habitual en mi, a la hora de hacer las fotos para el blog prepararlas con tiempo, hacer composiciones especiales y utilizar accesorios para adornar las recetas, siempre voy con el tiempo justo, prisas y mi cámara no da mucho de sí. En ésta ocasión he intentado, no con mucho éxito por cierto, hacer una excepción con un motivo para mi muy especial.
Los dias 8 de Noviembre, son días tristes para mi, éste último hizo 28 años que murió mi madre. Era una persona dulce, cariñosa, encantadora, paciente, trabajadora, siempre con una sonrisa, era especial, buenisima madre, esposa y abuela, magnifica costurera y con mucho arte en la cocina malagueña, era única y se nos fue tan joven que cada día la echo más de menos. Quise que el pasado dia 8 en Mi cocina virtual se la recordara con detalles de ella, utilicé su juego de café, que sigue intacto a pesar de los años (más de 60 años de uso) y haciendo un bizcocho dulce y tierno como ella, pero no pude subirlo al blog, no podía escribir, he esperado unos dias aunque ése nudo que se forma en mi corazón y las lágrimas que intentan salir casi me impiden hacerlo aún.
El bizcocho lo preparé de zanahorias con nueces. Era la primera vez que lo hacía y elegí la receta de mi famoso libro 500 pasteles de Susannah Blake, me consta que hay numerosisimas recetas de éste bizcocho clásico, pero éste con su toque de canela y jengibre me resultó tentador y me quedó especialmente delicioso, dulce, cremoso y esponjoso, quizás porque lo preparé pensando en ella: mi madre.
¿Como lo hice?
Precalentar el horno a 180º C y engrasar un molde circular pintándolo con mantequilla derretida.
Mezclar 150 gramos de azúcar moreno, 240 mililitros de aceite de oliva (un vaso) y tres huevos con la minipimer.
Añadir la ralladura de un limón, una cucharadita de canela molida y media cucharadita de jengibre en polvo.
Tamizar 230 gramos de harina con levadura (utilizo la marca Harimsa) y remover bien.
Agregar dos zanahorias grandes ralladas (que sean frescas, de las que solemos comprar en la plaza hasta con su tallo verde) y 90 gramos de nueces picadas.
Remover la masa y echar la mezcla en el molde.
Hornear aproximadamente una hora, que esté doradito y hasta que un pincho salga limpio insertándolo en el centro.
Dejar que se enfríe para desmoldar.
Si me permiten, vuelvo a mostrar a quienes visitan Mi cocina un detalle del cuadro Las nueces pintado por mi suegro, que cuelga en mi salón desde hace unos diez años, casi dan ganas de cogerlas delcuadro para hacer el pastel, ya que es tal la perfección de la pintura. Es un gran pintor malagueño.
TU RECUERDO
Una mudez honda
traspasa mi existencia.
Tu recuerdo
duerme en mis soledades.
Madre de mis besos
nunca te olvido.
La amargura de no tenerte
llena mi corazón de sombras.
Quisiera
que tus brazos
acunaran mis sueños,
y un velo prodigioso
de rayos de luna
fundieran nuestras risas.
Te fuiste igual
que una ráfaga
melódica de viento,
y en mi
se apagó para siempre la luz.
De mi añorada amiga Pepita Ruiz Rumbado, publicado en su libro Anclada en mi vida que me dedicó y guardo con cariño, en recuerdo de mi queridisima madre, 28 años sin ella.....