Hoy toca receta de repostería. Un delicioso bizcocho esponjoso de manzana zanahoria y jengibre que os va a sorprender. Primero por el delicioso sabor, especiado y jugoso. Después por la textura ya que tanto la manzana como la zanahoria le dan humedad y hace que el bizcocho esté más fresco durante tres o cuatro días sin resecarse. Y finalmente por la sorpresa al encontrar manzanas cocidas en su interior que descubriremos al comer la tarta y le dan un toque exquisito.
La receta es muy fácil de hacer y os animo a prepararla. La he hecho para un Concurso de repostería que estamos haciendo para LeCreuset unos cuantos bloggers y al que os animo a participar. Id mirándolo en su página de Facebook. Basta con dar a megusta y votar por una de las 8 fotos participantes. Si queréis elegir la mía, os lo agradezco, pero todas son chulísimas. Vamos a la cocina, id precalentando el horno que esto se hace en lo que lo pensamos...
Ingredientes para un bizcocho de 28 cm de diámetro
3 zanahorias, 3 huevos L, un trocito de jengibre, 2 manzanas, 1 botellín de Ginger Ale, 1 vaso de aceite arbequino, 2 vasos de azúcar, 1/2 vaso de yogur, 2,5 vasos de harina y 1/2 sobre de levaduraCómo hacer un bizcocho de manzana, zanahoria y jengibre.
Comenzamos picando la manzana en rodajitas muy finas y las ponemos a cocer en el Ginger Ale hasta que estén muy blandas y manejables. Entonces las enrollamos como haciendo florecitas que después pondremos en el centro del bizcocho como en la foto final del siguiente fotomontaje.
Mientras las láminas de las manzanas van cociendo en el Ginger Ale, batimos bien los huevos y el azúcar incorporando luego el aceite, la harina, el yogur, la levadura y las zanahorias y el jengibre rallados. Batimos bien hasta obtener una masa cremosa y húmeda.
Volcamos el contenido del bol en nuestro molde de Le Creuset. Yo he usado un estupendo molde para tartas con aro desmontable que resulta comodísimo por su estupendo efecto antiadherente y por lo rápido que permite que lo desmoldemos sin esfuerzo (y sin cargarnos el bizcocho)
Una vez relleno el molde, colocamos en la zona central las manzanas enrolladas y lo metemos al horno. Yo lo he tenido 1 hora y 20 minutos a 145º para que se haga despacito y quede en su punto. Apagamos cuando podamos meter una brocheta y salga limpia y el exterior haya quedado bien dorado.
No os preocupéis por dejar más o menos bien las láminas de manzana enrolladas porque la masa del bizcocho al ir creciendo las engullirá y las hará desaparecer, lo cual hará que sea una sorpresa para los comensales encontrárselas al probar este delicioso bizcocho esponjoso lleno de sabor. En la foto hecha a través del cristal del horno lo veis perfectamente. Por eso la superficie del bizcocho no queda del todo homogénea sino arrugada y un poco cuarteada en el centro.
Al terminar, sacamos el bizcocho bien doradito y lo espolvoreamos con azúcar glass, dejándolo listo para su consumo en cuanto se enfríe. (Si podéis resistir la tentación, claro) En resumen, este bizcocho esponjoso de manzana zanahoria y jengibre es un bizcocho algo húmedo, lleno de sabor y con la sorpresa de encontrar manzanas cocidas en ginger ale en su interior. Seguro que lo probáis... Sed felices,
Espero que te haya gustado. Puedes ver más entradas como esta en www.lazyblog.net