La adoro, es simplemente perfecta. Julia Child como ya sabéis ocupa el puesto número uno de los chefs en mi hacer en la cocina.
Es meticulosa, cuidadosa, fina y perfeccionista?y sus recetas salen todas y cada una bien. Adoro el toque del sabor de la mantequilla en los platos, bien es verdad que no es lo más sano pero me encanta. En la cocina francesa abunda este ingrediente, y de vez en cuando preparar alguno de sus platos es sinónimo de disfrute máximo.
Los bogavantes Thermidor que hice el pasado año son también de su libro El arte de la cocina francesa 1, y estaban buenísimos.
Hoy os traigo un bizcocho clásico con sabor a naranja, pero la esponjosidad que tiene es lo que lo hace especial. Es parecido al pa de pessic catalán con una glasa suave para aumentar el aroma y sabor a cítrico.
INGREDIENTES (molde 22cm)
4 yemas
4 claras
Azúcar (120gr para el bizcocho y 1 cucharada sopera para las claras)
115gr harina
Ralladura de 1 naranja
Zumo de naranja (80ml para el bizcocho y el resto para la glasa)
Una pizca de sal
1 cucharadita de levadura
80gr de azúcar glass para la glasa
ELABORACIÓN (lo hice con varilla manual)
Batimos las yemas con el azúcar hasta que nos resulte una mezcla amarilla pálida, y al elevar la varilla caiga en forma de cinta.
Añadimos el zumo y la piel incorporando bien.
Tamizamos la harina con la sal y la levadura y añadimos poco a poco hasta integrarla toda.
Montamos las claras a punto de nieve. Cuando empiecen a tener picos, añadimos el azúcar y la sal y seguimos batiendo hasta que monten por completo.
Añadimos en tres veces a la mezcla de yemas, con la misma varilla y haciendo movimientos envolventes y suaves.
Disponemos la masa en un molde engrasado y llevamos al horno previamente calentado a 180º durante unos 35 min o hasta que pinchemos con un palillo y este salga limpio. Veremos que estará hinchado y dorado.
Esperaremos 10 minutos, desmoldaremos y dejaremos enfriar sobre una rejilla.
Para hacer la glasa pesaremos 80gr de azúcar glass y le iremos echando el zumo a cantidades pequeñas mientras removemos con un tenedor hasta conseguir la textura que queramos más o menos líquida.