A partir de varias recetas que he publicado hasta ahora, imagino que os habéis hecho una idea de lo que me gustan las cosas de tradición, y encontrar la forma de que cohabiten con la innovación. Hace unos días os traje unos cupcakes (sin duda, unos dulces de carácter americano). Hoy, sin embargo, os traigo una receta de esas que se hacen en un momento y están igualmente deliciosas de comer.
Este bizcocho lo podría haber preparado perfectamente cualquiera de nuestras abuelas y haberlo servido junto a un vaso humeante de leche al cacao y una onza de chocolate. Quizá soy demasiado joven para conocer del todo la tradición, pero recuerdo con singular complacencia las meriendas que me preparaba mi madre de vez en cuando. Hacía el típico bizcocho de yogur de limón y mi hermano y yo nos lo comíamos encantado. Hoy he querido recordar una de esas tardes, pero con un bizcocho diferente que aglutine de alguna forma el núcleo de cualquier bizcocho junto al anexo de lo que he aprendido a través de mis peripecias en este mundo tan dulce.
He sustituido el yogur de la receta original por crema agria o "creme frêche", que podéis encontrar en cualquier supermercado y sin duda aporta un punto extra de jugosidad al bizcocho. Además de la ralladura del limón, también he añadido un poco de vainilla, pero lo podéis cambiar por el extracto que prefiráis e incluso podéis añadirle pepitas de chocolate que al ser la masa tan espesa se repartirán perfectamente.
¿Os apetece un trozo de tierna y deliciosa tradición? Pues coged el delantal, los pocos ingredientes que debajo os indico, unas varillas y un bol y a batir con cariño y buen humor.
INGREDIENTES
3 huevos XL (fríos)
125 gramos de crema agria (fría)
125 gr de azúcar blanquilla
125 gr de azúcar moreno
60 ml de aceite de oliva
60 ml de leche entera (fría)
la ralladura de 2 limones
1 cucharadita y media de vainilla en pasta o extracto de vainilla
375 gr de harina normal.
10 gr de levadura químicaUTENSILIOS
1 bol amplio
1 batidor de varillas manual
1 tamiz o cedazo
Cucharas medidoras
1 rallador
1 molde de aluminio alto de unos 18 a 20 cm.
PREPARACIÓN:
Engrasamos el molde del bizcocho con spray especial desmoldable o con aceite de oliva.
1. Preparamos los ingredientes:
Mezclamos la harina con la levadura y las tamizamos.
Rallamos los limones y mezclamos la ralladura con el azúcar. Dejamos reposar unos 10 minutos.
2. Mezclamos los huevos con el azúcar, la ralladura de limón, la leche, la vainilla y la crema agria hasta que todos los ingredientes se integren y no hayan grumos.
3. Añadimos la harina y la levadura de un golpe y mezclamos con un batidor de varillas manual. Removemos enérgica y constantemente hasta que no quede ni un grumo y quede una consistencia espesa.
4. Ponemos a precalentar el horno a 180º con calor arriba y abajo y metemos la masa del bizcocho en la nevera, mientras tanto.
5. Cuando el horno alcance la temperatura correcta, vertemos la masa fría en el molde engrasado y lo colocamos sobre una rejilla a media altura.
6. Horneamos de 50 a 60 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo este salga limpio. No abráis el horno hasta que pasen al menos los 30 primeros minutos.
7. Una vez el bizcocho esté hecho, lo sacamos y lo dejamos templar 10 minutos en el molde. Después, desmoldamos sobre una rejilla y dejamos enfriar completamente. Rociamos su superficie con azúcar glas y servimos solo o acompañado de lo que más os guste.
PASO A PASO
Receta adaptada de: blog de Megasilvita
Espero que os haya gustado.
Un beso,