Para animaros os traemos unas sencillas brochetas de solomillo de cerdo, en realidad puntas que han ido quedando de otras preparaciones, y que con algunas verduras y un sabroso adobo con especias, van a quedar perfectas. Para aprovechar fuego y brasas van acompañadas con un Paté de berenjenas ahumadas que os presentamos hace unos días. En resumen, un plato para chuparse los dedos!
Ingredientes
Para el adobo
2 c/s de aceite de oliva
1 c/s de cebolla frita seca
1 c/c de zumo de limón
1 c/c azúcar muscobado
1 c/c de pimenton dulce
1/2 c/c de polvo de ceps
1/2 c/c de sal
1/2 c/c de ajo seco
1/4 c/c de pimienta negra
Para los pinchos
250 g de solomillo de cerdo
tomates cherry
pimiento rojo
champiñones
cebollitas de platillo
Preparación
El adobo
Colocar en un bol todos ingredientes secos, (si la cebolla frita es muy gruesa, triturarla un poco con el mortero). Mezclarlos bien y añadir el aceite de oliva y el zumo de limón y remover hasta formar una pasta más o menos homogénea.
Cortar el solomillo en tacos de unos tres centímetros aproximadamente. Untarlos bien con el adobo, colocarlos en recipiente cerrado y dejarlos reposar en el frigorífico un mínimo de 30 minutos.
Las brochetas
Remojar las brochetas de madera para que no se quemen durante la cocción.
Limpiar y cortar las verduras y hortalizas que vayáis a utilizar. En este caso: champiñones, pimiento rojo, tomates cherrys y cebollitas de platillo.
Montar las brochetas alternando carne y vegetales de manera que queden compactas.
Colocar en una parrilla sobre las brasas de la barbacoa, o alternativamente sobre una plancha al fuego, e ir cocinando y girando hasta que se haya dorado por todas las caras.
Retirar y servir. Se puede acompañar de ensalada y, por ejemplo, de este Paté de berenjenas ahumadas (hacer clic aquí para ver receta), que podéis hacer aprovechando las brasas.