Esta temporada el maceto-huerto de la terraza ha dado una pequeña cosecha de patatas violetas y las hemos utilizado en el rosti, más proximidad imposible. Los boletus son de la última salida al bosque en busca de setas. Y, antes de que lo preguntéis, la carne la seguimos comprando en el mercado :)
Ingredientes
300 g de solomillo de ternera
200 g de patatas violetas
100 g de ceps (boletus edulis)
sal, pimienta negra
aceite de oliva
Para dos personas
Preparación
El rosti de patatas violetas
Lavar y pelar las patatas.
A cuchillo o con un rallador cortarlas en juliana fina. Salpimentar.
En una sartén al fuego calentar un par de cucharadas de aceite. Formar un par de círculos, de un centímetro de grosor, con la patata y colocarlos en la sartén. Para esta operación va muy bien, aunque no es imprescindible, ayudarse con un aro de cocina, que retiraremos cuando la pieza haya cogido la forma y un poco de consistencia.
Girar las piezas de rosti cuando se haya tostado la base y dorar el otro lado. Como no son muy gruesas y están coratdas finas, se cocerán al tiempo que se tuestan. Retirar y reservar.
Limpiar bien los ceps y cortarlos en trozos pequeños.
Calentar una sartén al fuego con unas gotas de aceite e incorporar las setas troceadas. Saltearlas y, si tenemos tiempo y paciencia, ir dando un movimiento circular a la sartén e ir añadiendo un poco de aceite, al final obtendremos una emulsión que bien se puede llamar pil-pil de ceps. Sazonar.
Colocar otra sartén antiadherente al fuego con unas gotas de aceite y cuando esté bien caliente poner la carne. Cuando quede bien tostada una cara dar la vuelta y cocinar la otra. La carne quedará tierna y en su punto en el interior y crujiente y caramelizada en el exterior. Salpimentar al gusto.
Para emplatar colocar el rosti en el centro del plato y encima el filete coronado por un puñado de ceps y su aceite.
Si te gusta la carne, aquí te dejo dos platos más para que los disfrutes:
Solomillo de cerdo con hierbas y manzanas
Redondo de ternera asado