Yo nunca he sido una persona muy de new year resolutions; por lo general los giros de mi vida han acontecido cuando tocaba, y no con el inicio del año. Pero este quiero que sea diferente y tengo un reto para 2017: dibujar y pintar sobre galletas. Saber hacer perspectivas, sombras, luces. Difícil pero no imposible.
Mientras no sepa hacerlo -estaría bien que de forma repentina naciera en mí el talento pintor, pero lo veo improbable- habré de seguir buscando un curso donde aprender. Todo un reto viviendo en Polonia; por ahora voy a tener que conformarme con disfrutar la magnífica obra de otros galleteros, artistas, pintores e ilustradores.
Aunque bien pensado también es la excusa perfecta para que uno de mis ilustradores favoritos acceda a decorar unas galletas con su enorme talento e inigualable estilo. Me refiero al excelente Daniel d’Ors, diseñador gráfico, creativo y sobre todo ilustrador.
Podemos llamar colaboración a este proyecto porque yo puse las galletas, el icing y presté un bolígrafo alimentario de mi propiedad. Pero no es necesario decir que fue Daniel el que hizo todo el trabajo artístico (puedes clicar sobre las imágenes para ver cómo fue el proceso).
He de reconocer que cuando me dijo de hacer unas galletas de bichos me dejó algo perpleja. Pero ha sido un placer verlo trabajar sobre unas sencillas galletas glaseadas en color blanco, haciendo aparecer insectos de la nada. El resultado final es impactante, creedme si os digo que en vivo estas galletas son un espectáculo. Tanto es así que no han sido devoradas por nadie, sino que han pasado a formar parte de mi colección particular.
Aprenda o no a pintar sobre galletas en este 2017, hay algo que no creo que logre jamás, que es el talento para pintar y dibujar. Eso, sencillamente, se tiene o no se tiene. Daniel lo tiene, yo no. Pero no pienso darme por vencida, cualquier oficio se puede aprender y espero de aquí a un año ser capaz de hacer al menos una galleta bien pintada.
Hasta entonces, no dejaré de seguir a artistas como Daniel d’Ors -soy adicta a su instagram hasta que estrene su nueva web- para no perderme ni una sola de sus maravillosas ilustraciones. Aunque, nadie es perfecto, su arte no se pueda comer.