Viene del famoso bizcocho alemán "Kugelhopf", es alto y no demasiado dulce, se hacen en moldes muy decorados tipo los Nordic Ware americanos que tienen unas formas muy bonitas pero sobre todo que desmoldan perfectamente aunque tengan aristas o recovecos imposibles. Los primeros moldes antiguos se encontraron en unas excavaciones cerca de Viena y tiene una forma parecida a los actuales. Se preparan en muchos países de Europa: Austria, Suiza, Hungría, Francia o en la región de Bohemia, pero todos derivan del alemán, así como el famoso Kugelhopf Alsaciano, o el italiano Pandoro, muy parecidos todos ellos.
Ahora que pienso, hace muy poco he preparado el "Blondie de Chocolate Blanco" y casi un año antes mi "Apple Crumble o Crisp" tan estupendo y fácil de hacer, en fin, será que el 4 de Julio fiesta nacional americana me inspiró a preparar estos dulces ahora tan de moda y también muy "made in USA" y "made" en muchas de nuestras cocinas reposteras.
En la receta explico como echar la masa en el molde, ya que es muy importante para que no contenga aire y queden todos sus huecos bien rellenos.
Fijaros en la imagen inferior y veréis como queda el bizcocho por dentro; sólido y sin burbujas ni huecos.
Siempre lo preparo con estas nueces de California, pues las nueces pecanas me cuesta mucho encontrarlas. Queda igual de rico, también os lo digo.
50 gramos de Mantequilla
30 ml. de Aceite de Girasol
250 gramos de Azúcar
2 Huevos medianos
2 Yogures (blancos naturales o tipo griegos)
270 gramos de Harina de Repostería
1 cucharadita de Bicarbonato sódico
1/2 cucharadita de Sal fina
1 cucharadita colma de levadura en Polvo Royal
30 gramos de Chocolate en polvo (Valor)
120 gramos de Nueces
Se enciende lo primero el horno para que esté caliente cuando metamos el bundt cake y lo graduamos a 180 grados.
Cuando lo metamos en el horno se colocará el molde en una rejilla, nunca en bandeja de horno.
Empezamos ya a preparar nuestro estupendo bundt cake de chocolate & nueces.
En un bol grande mezclamos la mantequilla (temperatura ambiente), con el aceite de girasol y el azúcar. Tiene que quedar blanquecino y bien batido.
Añadimos a continuación el primer huevo, batimos; añadimos el segundo huevo y mezclamos bien.
En otro recipiente mezclamos la harina con la levadura en polvo, la sal fina, el chocolate en polvo y la cucharadita de bicarbonato sódico, cuando esté bien mezclado lo tamizamos en la primera preparación que hemos hecho de los huevos con la mantequilla y el aceite de girasol.
La harina la echaremos alternándola con los yogures, es decir unas cucharadas de la mezcla de harina y un poco de yogur y así sucesivamente hasta terminar de incorporarlo todo.
Se mezcla bien todo con una espátula y se enmanteca el molde con mantequilla líquida con ayuda de un pincel de tamaño medio o mejor aún se le echa un poco de spray especial de repostería que nos viene de perlas para estos menesteres. No hace falta echarle harina ya que estos moldes son muy antiadherentes.
Se hornea a 180 grados durante 45 minutos (a los 40 minutos tenéis que echar un vistazo, ya que todos los hornos no son iguales).
Pasado este tiempo se apaga el horno, se saca para que se enfríe encima de una rejilla y a los 10 minutos se desmolda, no más tiempo, pues se nos podría romper.
Ya en el plato o bandeja se deja enfriar completamente.
Importante:
En estos moldes no se echa la mezcla como estamos habituados a hacerlo, sino que debemos echar la mezcla siempre por el mismo sitio. Es la masa la que se va "colocando" en los recovecos del molde.
Después sobre la mesa le damos unos pequeños golpes para que la masa se estabilice e impregne por igual todos los rincones de nuestro precioso molde y que no tenga aire para evitar las burbujas en el bundt cake.
Os dejo unos modelos preciosos y muy clásicos de estos moldes de repostería, sólidos y robustos como ellos solos, vamos, que se pueden dejar en herencia o haberlos heredado después de cientos de usos y siguen impecables y que nos sirven para hacer nuestros Bundt Cakes, pues imaginaros la rabia si después de prepararlos se nos estropean, por favor, con la alegría que nos da cuando empiezan a subir y a subir...
También os comento que no son baratos ya que por ejemplo estos que he escogido para enseñaros están entre 35 y 44 €, pero ya os comento que duran para toda la vida, el primero que aparece en la imagen es uno de los más usuales. Merece la pena la inversión, con uno sería suficiente pero el que tiene un molde de estos, siempre quiere otro... es algo así como los zapatos que siempre uno más nos viene perfecto para....pues con los moldes nos pasa casi igual ;o)
Bueno, pues ya he terminado con este rico bizcocho que tiene normalmente una presentación y sabor inmejorable. Se mantiene tierno unos tres días y también se puede congelar y usarlo para acompañar un postre o servirlo de merienda o desayuno en cualquier momento, aunque cuando lo he mencionado en mi casa, no me he atrevido a seguir con esa idea. Os dejo como siempre también el Facebook de La Taza de Loza por si queréis entrar a ver qué hay por ahí.
Mientras tanto, sed felices, cocinad y disfrutad mucho.