Desde entonces...me encantaaaaaa!!!
Fue cuando a mi suegro le regalaron unos cuantos kilos. Y con tanta cantidad decidí hacer este dulce para repartirlo entre toda la familia y amigos. Tiempo después, vuelvo a cocinarlos, esta vez gracias a Mercedes, que me regaló una bolsa lleniiiita de unos frutos espectaculares. Ecológicos, con un color precioso y un olor que daba gusto.
El membrillo es un fruto de color amarillo, que no suele tomarse en crudo por estar demasiado duro y tener un sabor poco agradable. Apenas destacan vitaminas y minerales, salvo potasio y vitamina C, que se pierde al cocinarlo. Tiene gran cantidad de fibra (gracias a la pectina y mucílagos) y taninos, que aportan propiedades astringentes.
La forma más usual de consumirlo es asado, en almíbar con canela o el llamado dulce o carne de membrillo. Esta última, es la que yo suelo hacer porque dura muchísimo y me permite comerlo de cuando en cuando y usarlo para otras recetas.
Cómo lo hagáis dependerá de vosotros, yo prefiero usar la Thermomix por la comodidad, Mercedes me comentaba que lo hacía de forma tradicional y doy fe de lo riquísimo que le sale. ¿La invitamos a darnos su receta?
Os recomiendo que de una forma o de otra, probéis a "fabricar" vuestra propia carne de membrillo.
Ingredientes
800 grs. de membrillos
750 grs. de azúcar blanquilla
1 limón entero pelado
Elaboración (con Thermomix)
Lavar los membrillos, quitarle el corazón y trocear (dejad la piel).
Introducir en el vaso el limón sin piel ni pepitas partido en dos.
Añadir la mitad de los frutos y el azúcar. Pulsar 3 ó 4 veces el botón turbo para triturar.
Agregar el resto de fruta y azúcar. Triturar de nuevo.
Programar 30 minutos, temperatura 100 y velocidad 10.
Id bajando la velocidad conforme se vaya quedando con la textura que más os guste, pero siempre debe moverse la mezcla.
Si pasado ese tiempo está demasiado líquido podéis programarlo más tiempo. Tened en cuenta que al enfriar suele cuajar un poco más.
Pasar a los recipientes donde lo vayáis a guardar (procurad que cierren herméticamente).
Yo suelo hacer siempre dos tandas, como mínimo, una la dejo más cuajada para poder cortarla y otra más flojita, con una textura más fácil de untar, como la mermelada.
Lo más normal es poner la misma cantidad de azúcar que de fruta, suelo poner algo menos de azúcar para que salga menos dulce, pero nunca debe tener menos del 70%
Combina a la perfección con queso y debéis tener cuidado porque querréis comerlo a cucharadas y tiene muuuuucha azúcar!!!!
¿Cuál es vuestra combinación favorita????
Hasta el próximo sueño.