Cuando creíamos que ya se había acabado la temporada de asaltos del reto asaltablogs, viene Marga y nos lanza una bomba.
Se le ocurre crear el asaltablogs imprevisible...¿y que es eso? nos preguntamos todos. Pues un reto en el cual durante el mes de julio hay libertad de elegir blogs para asaltar . No hay fechas de publicación marcadas, podemos publicar a lo largo del mes cuando nos venga bien y a cuantos blogs nos apetezca.
Al ser un reto imprevisible, se corre el riesgo de asaltar a varios a la vez y que nadie te asalte a ti...pero esto es un juego y lo que pega es ser generosa y "robar" las recetas de esos blogs que siempre ves y nunca tienes la ocasión de asaltar.
Para ser justa, mi primer asalto imprevisible (os aviso que habrá varios jejeje) tenía que ser a la "Jefa", como cariñosamente llamamos a Marga la creadora de este juego y dueña del blog Azafranes y Canelas y no podía estrenarme mejor que con este carpaccio de langostinos y puerros.
Un entrante, sencillamente exquisito. Os aseguro que yo no soy amante de los carpaccios y este me ha encantado. No puedo explicarlo, tenéis que probarlo.
INGREDIENTES: Para cuatro personas
4 o 6 langostinos
1 puerro
4 rebanadas de pan de molde
2 dientes de ajo
aceite de oliva y sal
PREPARACIÓN
Comenzamos pelando los langostinos y desechamos las cáscaras pero nos quedamos con el jugo de las cabezas que extraeremos apretándolas.
Doramos los ajos en láminas en una sartén con aceite (como medio vaso). Cuando los ajos estén doraditos, le añadimos el jugo de las cabezas y removemos para que se integren los sabores en el aceite.
En un trozo de film transparente pintado de aceite, envolvemos un langostino pelado.
Con una maza o con el rodillo aplastamos los langostinos. Lo hacemos con todos.
Y así hacemos los carpaccios.
Ponemos todos los langostinos en una fuente y los cubrimos con el aceite caliente de dorar los ajos y el jugo de las cabezas. Reservamos unos 20 minutos para que se cocinen.
Mientras tanto, vamos a filetear el puerro.
Y a dorarlo en una sartén con aceite. Acordaros de salar un poco y pochar hasta que se dore. Luego dejamos en un colador para escurrir el aceite.
Y también vamos a preparar unas tostadas que serán la base de nuestro entrante. Hacemos círculos con un vaso en rebanadas de pan de molde.
Y las tostamos en un grill o tostador, para que nos queden crujientes.
Y sólo nos queda montar nuestro delicioso aperitivo. Encima del pan ponemos un carpaccio de langostino, que cubra la base, incluso podemos dejar algún ajito, si os gusta. Y encima unas hebras de puerro.
El contraste es brutal, la tostada cruje, el carpaccio está delicioso y el toque dulzón del puerro le va genial.
No os imaginais la combinación...¡es exquisita!