Está claro que nuestra alimentación en verano cambia, dejamos apartados muchísimos platos esperando que vuelvan los fríos para incluirlos de nuevo en nuestra dieta. Normalmente a mediodía, coincidiendo con las horas de más calor, nuestro almuerzo se hace más ligero, y el pescado le gana el terreno a la carne en esta época. En los sitios de costa el plato estrella del verano son las frituras de pescado, y una de ellas que gusta muchísimo tradicionalmente es este cazón en adobo, conocido en muchos lugares como bienmesabe. Como siempre el secreto del éxito del plato está en la materia prima, por lo que es fundamental comprar un pescado bien fresco. Aquí tiene también especial importancia el adobo en el que se introduce el pescado y el tiempo que se mantiene en él. Una forma muy sencilla y cómoda de preparar el pescado con antelación para después sólo dedicar unos minutos a su fritura. De nuevo es un plato que gusta mucho a los niños y que les ayuda a incluir el pescado en su dieta. Es fundamental su fritura en una freidora y un buen aceite de oliva virgen o virgen extra para freírlo.
INGREDIENTES:
750 gr. de cazón cortado en rodajas
Vinagre de vino blanco
Sal
Una cucharada de orégano seco
Una cucharada de pimentón dulce
Tres dientes de ajo
Dos hojas de laurel
Una cucharada de cominos
Aceite de oliva virgen extra para freír
Harina especial para freír pescado
PREPARACIÓN:
Lo suyo es preparar el adobo con bastantes horas de antelación para que el pescado coja el sabor de éste. Yo lo preparé el día antes y lo metí en el frigorífico hasta la hora de freír. Limpiamos y cortamos las rodajas de cazón en trocitos. Salamos. Machacamos los ingredientes del adobo en un mortero: ajos, comino, pimentón, orégano y laurel. Ponemos en un bol el cazón cortado, añadimos los ingredientes majados en el mortero y cubrimos todo con vinagre (si queréis rebajar un poco podéis añadir un poco de agua). Tapamos con papel film el bol (o tapadera) e introducimos en el frigorífico durante al menos seis horas o hasta la hora de freír.
A la hora de freír encendemos la freidora o una sartén honda y cubrimos de aceite de oliva virgen extra, lo suficiente para que después el cazón quede totalmente cubierto de aceite. Mientras se calienta el aceite vamos sacando el cazón de su adobo y secando con papel absorbente. Rebozamos los trozos de cazón en harina y vamos poniendo en la freidora por tandas, para que se frían bien. Cuando estén dorados, sacamos y dejamos escurrir el exceso de aceite sobre papel absorbente. Servimos en un plato o fuente acompañado de una ensalada.
Pues nada, a disfrutar de un plato típico, de los de siempre.
Feliz lunes.
Lidia.