Últimamente, en casa, nos estamos acostumbrando a cenar con tortitas mexicanas.
En esta ocasión, he optado por hornearlas con unas lonchas de queso fresco salado, unas angulas sucedáneas decoradas con unos pepinillos, lo cual genera un estupendo contraste de sabores puesto que unimos el queso salado con el agrio de los pepinillos y el sabor de las angulas sucedáneas.
Ingredientes (2 personas):
1 blíster de angulas sucedáneas congeladas
2 lonchas gruesas de queso fresco salado
2 tortitas mexicanas
12 pepinillos en vinagre
Colorante alimentario rojo (o del color que más os guste)
Preparación:
Colocamos las tortitas en dos cuencos redondos, para que al hornearlas adquieran la forma del cuenco.
En el fondo de cada cestita (toma esa forma por el cuenco) colocamos una loncha de queso salado.
Una vez descongeladas las angulas sucedáneas, mezclamos estas con el colorante y las repartimos entre ambas cestitas cubriendo el queso.
Decoramos colocando los pepinillos sobre las angulas sucedáneas.
Horneamos con calor arriba y abajo a 160º unos 25 minutos.