Vuelven los postres al blog, y lo hacen por la puerta grande con unas cestitas de chocolate rellenas de una base de cookies y una mousse de café, y coronadas con una cremita ligera de queso. ¿Apetecibles, verdad?
Todas las buenas recetas surgen de la manera más improvisada y ésta no se queda atrás. Buscando un buen postre que culminara una buena comida de amigos, me encontré la receta denominada zuccherini en un libro de "chocolate" que tengo por casa. No me terminaba de convencer, era demasiado simplista y decidí tunearla por completo (la original era una cesta de chocolate, rellena de una mousse de chocolate y nata (crema de leche) por encima).
¿Qué tiene de especial este postre?
* La cestita de chocolate está hecha con dos capas, una con chocolate negro y otra con chocolate con leche
* La mousse de café, que se lleva de maravilla con el chocolate. Además, lleva un toquecito de crema de ron
* La crema de queso, que suavizará el sabor amargo del café y del chocolate negro
* Las cookies, que harán un efecto "bizcocho" y darán esas notas clásicas de mantequilla
Vamos con la receta!
Ingredientes para 12 cestitas de chocolate
Cestas de chocolate:
150 g de chocolate negro
150 g de chocolate con leche
6 cookies con pepitas de chocolate
12 moldes de magdalenas
Mousse de café:
3 cucharadas de azúcar
4 cucharadas de agua
1 cucharada de café soluble
3 yemas de huevo
1 chorreoncito de crema de ron
200 ml de nata (crema de leche) para montar
Crema de queso:
100 ml de nata (crema de leche) para montar
150 g de queso de untar
3 cucharadas de azúcar glacé
1 cucharadita de vainilla líquida
Cookies y fresas para decorar
Preparación y comentarios
Cestitas de chocolate:
1. Haremos dos capas de chocolate, la primera con chocolate negro y la segunda con chocolate con leche. Fundiremos en primer lugar el chocolate negro, bien al baño María o bien en el microondas (ojito, id controlandolo cada pocos segundos y removiendo). La clave es que este chocolate esté fundido y tenga cierta consistencia (si os queda demasiado líquido esperad un pelín).
2. Con ayuda de una brocha de cocina pintaremos los moldes de magdalenas y reservaremos en la nevera durante 15-20 min.
3. Fundimos el chocolate con leche y haremos la misma operación, pintando en este caso sobre la capa de chocolate anterior. Así conseguiremos una capa gordita de 2 chocolates y que nos ayudará al desmoldado. Reservamos en la nevera.
Mousse de café:
4. Ponemos al fuego un cazo con el agua, el azúcar y el ron. Dejamos hervir durante unos minutos. Mientras tanto vamos separando las yemas (qué hacer con las claras de huevo que sobran).
5. Echaremos el almíbar poco a poco sobre las yemas y batiendo constantemente con unas varillas. Dejamos reposar en la nevera un ratito.
6. Mezclamos la preparación anterior con la nata montada (crema de leche) con movimientos suaves y envolventes (podemos montar la nata (crema de leche) durante el paso 2, así aprovechamos el tiempo. Recordad que la nata (crema de leche) para montar debe estar muy fría). Reservamos en la nevera.
Crema de queso:
7. Batimos con las varillas eléctricas el queso crema, el azúcar glacé y la vainilla. Cuando todo quede como una especie de crema, lo mezclaremos con la nata montada (crema de leche) (movimientos envolventes). Reservamos en la nevera.
Montaje de las cestitas de chocolate con mousse de café y cookies
8. Desmoldamos las cestitas de chocolate con muchísimo cuidado. Aunque salen sin problemas y el papel se despega muy bien, recomiendo no ir con prisas.
9. Colocamos sobre cada una 2 cucharaditas de cookies machacadas (si por casualidad se nos ha roto un poco la base de la cestita al desmoldar, esto hará de pagamento).
10. Rellenar la cestita con la mousse de café (hasta más de la mitad)
11. Reservar en la nevera 1 h para que se asiente la mousse y damos tiempo a que la crema de queso coja cuerpo antes de añadirla.
12. Pasado el tiempo, rellenar hasta el borde la cestita con la crema de queso. Guardar en la nevera toda la noche.
13. Al día siguiente, decorar al gusto, con fruta por encima, con cookies machacadas, etc.
Notas:
1. Aunque da la sensación de que son muchos pasos, se pueden hacer algunas cosas en los tiempos de espera, sobre todo fregar todos los cacharillos.
2. A la hora de montar la nata (crema de leche) para la mousse, añadir también la cantidad que necesitáis para la crema de queso, luego apartais un poco y listo.
3. No penseis que este postre es muy pesado, para nada. Daros cuenta que no empleamos mucho azúcar, por lo que no resulta nada empalagoso.
A la hora de degustar...
¿Utilizamos la cucharilla o nos lo comemos con las manos? Yo lo tengo muy claro, con las manos!!
En el mismo bocado tenemos que llevarnos todos los componentes del postre. De esta manera, podremos apreciar: en primer lugar la crema de queso (muy fugaz) y el sabor potente del café y el toque de licor (perdura bastante), seguido por la cookie (también muy fugaz) y el sabor final de la mezcla de chocolates (quitando protagonismo al café).
¿Todavía con dudas? ¡Mira el vídeo! Es una versión de las cestitas, pero rellenas de mousse de Nutella.
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Fuente: este post proviene de El Saber Culinario, donde puedes consultar el contenido original.
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