El Tzatziki está hecho simplemente con yogurt, pepino, aceite de oliva, hierbas frescas (generalmente menta o eneldo), ajo, jugo de limón y sal.
Es una salsa refrescante pensada para untar en pan pita o pan naan o para dipear con vegetales crudos o asados. Podéis utilizarla como salsa para un wrap o taco, con pollo, cordero, salmón o incluso para acompañar un plato de calamares.Es conocido como plato tradicional de la cultura griega, pero es más que probable que su origen sea turco, donde a algo prácticamente idéntico lo llaman cacik. Hace mucho tiempo, cuando el Imperio Otomano todavía estaba en pleno apogeo comercial, India ya preparaba la salsa raita a base de yogur. En aquel entonces, el pueblo indio estaba gobernado por una tribu persa a los que les gustaba un plato de arroz del norte de la India conocido como biryani pero lo encontraban demasiado picante y lo mezclaban con la salsa raita, una salsa fresca.
Cuando los persas volvieron a Oriente Medio, se llevaron consigo la salsa raita. Los griegos, del Imperio Otomano, disfrutaron inmensamente de esta salsa que poco a poco fueron transformando hasta que sus raíces indias desaparecieron. Así nació el Tzatziki (derivado de la palabra turca cacık).
El tzatziki es una de las cosas que más me gusta de la comida griega. Esta tentadora salsa de yogur y pepino es muy cremosa y llena de sabor. No os dará pereza prepararla porque es muy sencilla y la tendremos hecha en un plis plas. ¡Hasta es posible que tengáis los ingredientes en casa!
Tzatziki, Salsa griega de yogur y pepino
Dificultad: fácil
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Ingredientes
1 pepino
2 yogures griegos sin azúcar (de 125 gr cada uno).
1 diente de ajo
El zumo de medio limón
Sal y pimienta
2 cucharadas de menta, eneldo o perejil picado (opcional). Lo mejor es que las hierbas sean frescas pero también las podéis utilizar secas
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Preparación
Lo primero, lavad muy bien el pepino porque no lo vamos a pelar. Lo partís a lo largo y le quitáis la parte central de las pepitas y luego lo partís por la central. Después, lo cortáis en tiras largas y luego en cuadraditos pequeños. Estos cuadraditos de pepino los dejáis en un colador, los saláis y los dejáis reposar unos minutos para que suelten parte del agua.
Picáis el ajo. En un bol ponéis el yogur griego natural y añadid el pepino que tenéis reservado y el ajo, el zumo de medio limón y una cucharadita de eneldo (optativo). Mezclad bien. Para terminar añadid el aceite de oliva virgen extra y rectificáis de sal.
Servid frío. Si lo dejáis al menos un par de horas en la nevera, antes de servir, tendrá una consistencia más firme y un sabor más uniforme.
Web: Commememucho
Notas:
Eliminad todo el líquido del yogur y del pepino para que el resultado sea más cremoso. El yogur lo podéis poner dentro de una gasa, y sobre un colador, para que drene durante al menos 1 hora para que elimine todo el suero.
Podéis utilizar yogur normal sin problema y si lo queréis mas cremoso añadirle un poco de nata (crema de leche) para compensar la grasa del yogur griego.
Podéis optar por no añadir aceite si queréis que sea más ligero y menos calórico. No obstante, si ponéis aceite utilizad un aceite de oliva de calidad virgen extra. Merece la pena por el sabor y es más saludable.
Os aguantará unos 4 o 5 días en el frigorífico. Tapadlo con un poco de film transparente.