Hola a todos...Hoy os traigo algo diferente, que me ha encantado hacer...Viendo libros de cocina para variar, es un vicio sin remedio, me topé con "Conservas" de Oded Schwartz, una maravilla, una delicia de libro por las fotos y la información tan interesante. Pues aquí os dejo mi primera incursión este mundo que seguiré poniendo en práctica. Es emocionante ver pasar las estaciones y "conservar" los alimentos de temporada, consumirlos en cualquier momento además que alegran nuestra cocina.
La conservación en aceite es una antigua técnica mencionada en algunos escritos romanos, el aceite no sólo actúa como agente sellador sino que además le añade un agradable sabor a la comida.
Lo primero que hay que hacer es esterilizar el bote o los botes donde vas a poner la conserva. En este caso utilicé el método del agua hirviendo. Esteriliza todos los envases antes de usarlos, coloca los tarros lavados en una olla y cúbrelos con agua hirviendo. Mantén la ebullición 10 minutos. Saca los tarros y déjalo escurrir sobre un paño de cocina. Ponlos en una bandeja forrada con papel de cocina y sécalos en el horno frío. Las tapas, las arandelas de goma y los tapones de corcho debes sumergirlos unos segundos en agua hirviendo.
Ingredientes:
500 ml. de vinagre de vino blanco.
250 ml. de agua.
3-4 dientes de ajo troceados.
1 cucharadita de pimienta negra en grano.
2 cucharaditas de sal.
4-6 ramitas de tomillo.
1 kilo de setas variadas.
300 gramos de tomate seco.
1-2 tiras de piel de limón.
1 hoja de laurel.
Un buen aceite de oliva para cubrir.
Preparación:
Pon el vinagre, el agua, el ajo, la pimienta,la sal y el tomillo en la olla. Haz hervir la mezcla y cuécela a fuego lento a 30 minutos. Agrega las setas y los tomates, sigue la cocción 10 minutos más. Sácalas con la espumadera y escúrrelas bien. Saca el tomillo.
Coloca las setas, la piel de limón, el laurel y el tomillo en el tarro caliente previamente esterilizado. Calienta el aceite en una sartén a 75ºC y viértelo en el tarro de forma que cubra totalmente la mezcla. Perfora las setas con la punta de un cuchillo afilado para eliminar las posibles burbujas de aire y sella el tarro. La conserva estará lista en dos semanas. No hace falta meter en la nevera.
La cantidad resultante es de aproximadamente 1 kilo, tiene una caducidad de 6 meses.
Se puede servir como entrante sobre unas tostas o como condimento para pastas.
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¡Gracias por tus comentarios, con ellos sigo aprendiendo!