Como en todas las recetas se pueden hacer varias versiones más o menos saludables, eso mismo pasa con las cremas.
Pueden hacerse con agua partiendo de cero, poner caldo de verduras o bien de carne y pochar las verduras antes, añadir quesitos, un chorro de leche... y si añades nata (crema de leche) para montar y queso en crema ya te queda una crema feten.
Pero cuando queremos cenar algo ligero las primeras opciones son las más convenientes. Y para que no parezcan sosas puedes jugar con las especias o bien con mezclas de verduras con sabores potentes, como la crema de hoy.
Odio profundamente el apio en crudo, si la ensalada lo lleva yo ni la toco. Pero en cambio lo adoro hervido en caldos y me encanta el sabor que deja...cosas de la vida.
Una crema muy verde (que así da la sensación que es más sana), suave y delicada con sabor predominante de apio. La manzana no aporta dulzor.
INGREDIENTES
3 tallos de apio con sus hojas
1/2 puerro
1 patata mediana
1/2 cebolla
1/2 calabacín pequeño
2 manzanas
Caldo de verduras casero suave o agua
Sal, pimienta blanca
ELABORACION
Limpiamos bien las verduras y pelamos las manzanas. El calabacín lo dejamos con piel.
En una olla a fuego medio rehogamos todas las verduras y las manzanas cortadas a dados pequeños en un chorro de aceite de oliva. Salpimentamos al gusto.
Cuando empiecen a ablandarse las cubrimos con el caldo y dejamos hervir 20 minutos.
Trituramos bien y retocamos de sal.
Una vez lista la crema le volveremos a dar 5 minutos de hervor.
Notas
Yo uso un vaso batidor, va muy bien ya que tritura al máximo y deja unas cremas muy suaves. En caso de usar batidor de mano intentar pelar los apios sacando todas las fibras ya así evitaréis encontraros los hilos después.
Cuando pochéis las verduras sed cautelosos con la sal en el caso de usar caldo de verduras, ya que si este ya está salado luego quizás lo esté demasiado. En caso de usar agua volvemos a retocar al final.
El espesor de la crema dependerá del líquido que uséis para batir. Yo meto en el vaso batidor todas las verduras y voy añadiendo el caldo sobrante poco a poco para conseguir la crema deseada.
La variedad de manzana también va a gustos, a veces uso la verde ácida ya que le aporta un gusto diferente. Podéis ir variando.