Pero y la cassonade, ¿eso qué es lo que es? Pues eso señores es una auténtica delicia, de la categoría de lo exquisito y muy poco habitual por aquí. A mí me la han traído los reyes magos desde Bélgica pero igual online la encuentras. Es un azúcar moreno de caña con un sabor tostado a caramelo completamente diferente e increíble.
Una crepe con mantequilla y cassonade es un milagro para los sentidos, las capas de masa con mantequilla y el crujir de la cassonade te convencen de que éste es el dulce perfecto.
Yo me las tomo con reverencia para desayunar aunque como postre también funcionan ya que no son nada pesadas.
Si consigues tu alijo de cassonade no dejes de probarlas. Son otro nivel. Y si no, prueba con un buen azúcar de caña.
El otro día presentamos nuestro tutorial de ¿cómo hacer crepes? donde te enseñamos las bases para hacer crepes perfectas. Pues bien, esta foto es del proceso de aprendizaje y es un poco gordita, deberían quedar más finitas pero aún así estaban de morirse.
¿Y la música supongo que será celestial?
Desde luego, tiene que ver con estrellas.
Ingredientes para 6-8 crepes de 25 cm:
6 -8 crepes preparadas en casa
Relleno:
Mantequilla a temperatura ambiente
Cassonade
Preparación:
Para preparar las crepes seguimos las instrucciones de nuestro tutorial. Si las hacemos en el momento genial, si las tenemos en la nevera calentamos la crepera o sartén donde las preparamos y las ponemos un momento por cada cara, se calientan en segundos y quedan como recién hechas.
Para montar las crepes tomamos una crepe caliente, la ponemos en un plato, untamos con mantequilla a temperatura ambiente para que se extienda bien y distribuimos una cucharada de cassonade por toda la superficie, depende de lo golosos que seamos pondremos más o menos. Enrollamos o doblamos la crepe y lista para disfrutar.
Para mí son hoy por hoy el no va más del universo dulce.
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