El currywurst es la comida rápida por excelencia en Berlín, encuentras puestos especializados en este sencillo plato por toda la ciudad. El origen de este plato está en los duros años de posguerra en Berlín, concretamente su invención se atribuye a Herta Heuwer, que en 1949 comenzó a intercambiar con los soldados británicos botellas de alcohol casero a cambio de botes de ketchup. Ella añadía curry y algunos otros condimentos y lo servía con salchichas en el establecimiento que regentaba en el distrito de Charlottenburg. No se sabe la fórmula exacta que empleaba y hoy en día, los buenos puestos de Currywurst elaboran cada uno su propia fórmula y esta es la mía, la que después de probar en casa mas me recuerda a las que probé en Berlín...
Ingredientes para dos personas:
- 4 salchichas alemanas.
- 2 patatas medianas.
- 125 gr. de ketchup.
- 1 cebolla pequeña.
- 4 cucharaditas rasas de curry.
- 1 cucharadita de pimentón dulce.
- 1/2 cucharadita de pimienta molida.
- 1 cucharadita resa de azucar.
- 6 cucharadas de caldo de carne.
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- Sal.
Picad muy fina la cebolla y pochadla en una sartén a fuego medio con un par de cucharadas de aceite de oliva.
Poned a calentar la freidora a 180º o bien una cazuela con abundante aceite de oliva a fuego medio alto. Pelad las patatas, cortadlas en bastones y freidlas cuando el aceite esté ya caliente. Cuando estén listas, retiradlas a un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y echadles un poquito de sal.
Mientras, cuando la cebolla esté transparente, mas o menos tras 10 minutos, añadid a la sartén el ketchup, el caldo de carne, las especias, el azúcar, el bicarbonato y removed bien. dejadlo en la sartén 5 minutos removiendo de vez en cuando, probadlo y rectificadlo de sabor si queréis darle mas potencia de curry o un poco mas de pimienta negra. Reservad la salsa.
Poned las salchichas en una sartén a fuego medio alto, lo justo para calentarlas, sacadlas, cortadlas en rodajas y ponedlas en un plato junto a las patatas. Echad la salsa por encima y terminad espolvoreando por el plato un poquito de curry, tal y como hacen en los puestos callejeros berlineses...
Fuente: este post proviene de Hoy para cenar, donde puedes consultar el contenido original.
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