Una de mis opciones favoritas de comer la coliflor hoy en día es en forma de cus-cús. A parte de que no hay que cocerla, con el consiguiente olor en toda la casa no muy agradable, es una manera de introducir verdura en nuestra dieta del día a día sin apenas darte cuenta porque de esta manera no tiene apenas sabor
Os aconsejo comerla así, ya que es una verdura sin casi aporte calórico y con muchos beneficios en la dieta. Además, si la preparáis con otros alimentos como en este caso la quinoa, la comeréis sin daros cuenta
Siempre suelo de acompañar todas mis recetas con verduras, ya que es la mejor manera para consumirlas. Es verdad que en mi casa no hay problema con esto, pero una receta como la de hoy es una manera de comer este tipo de alimentos sin problemas
En un wok, pasamos con una gota de aceite el cus-cús de coliflor, hasta que adquiera cierto tono dorado sin parar de removerlo. En ese punto, agregamos la quinoa cocida y reservamos a parte. En el mismo wok, sofreímos media cebolla, junto con un trozo de calabacín y berenjena, y medio pimiento rojo todo en cubitos. Por último, agregamos la coliflor y la que no reservadas de antes y culminamos con unas habitas de edamame previamente cocidas y pasadas por la plancha y cebolleta fresca
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