Te damos algunas pautas de alimentación sana para que retomes los hábitos saludables al volver a la rutina.
La dieta mediterránea dentro de una alimentación sana
Cuando pensamos en una alimentación sana, el máximo exponente es la llamada dieta mediterránea.
La dieta mediterránea se caracteriza por el uso de frutas, verduras y hortalizas, legumbres, cereales, aceite de oliva, lácteos y carne. Estas características hacen de esta dieta una opción fantástica para una alimentación sana.
El problema es que, a pesar de tener a nuestro alcance estos productos, en nuestra alimentación suele haber un exceso de grasas, sal y azúcar, entre otros elementos que no son compatibles con unos hábitos de alimentación sana.
Tips para una alimentación sana
Al hablar de alimentación sana, puede venir a la cabeza dieta o perder peso, pero no es así. Cumplir unos hábitos de alimentación sana no tiene que ver con la pérdida de peso, sino con concienciarnos de que la alimentación repercute directamente en la salud.
Para llevar una alimentación sana, conviene seguir y aprender una serie de pautas que van a asegurarnos una vida mucho más saludable:
Tomar frutas y verduras de temporada a diario. La recomendación es de 5 piezas de fruta y verdura al día.
Comer legumbres al menos 2 veces por semana.
Consumir hidratos de carbono en forma de pan, pasta o cereales diariamente, mejor si son integrales.
Tomar al menos 2 lácteos al día. Esta cantidad dentro de una alimentación sana también dependerá de las características de la persona, así como de su edad.
Una alimentación sana se completa con el consumo de 2 a 4 raciones semanales de pescado y de 2 a 3 raciones de carne a la semana, combinando las carnes rojas con las blancas.
Dentro de las carnes, los embutidos deben consumirse de forma muy ocasional dentro de los hábitos de alimentación sana.
Consumo de aceite de oliva virgen, tanto para cocinar como para aliños.
El uso de condimentos como las especias y otros productos como el limón o el vinagre darán sabor a tus platos y evitará que utilices un exceso de sal.
Evitar alimentos procesados y precocinados. Existe un exceso de consumo de este tipo de alimentos, como fiambres envasados, comidas ultracongeladas, pan de molde o galletas, no recomendables en una alimentación sana. Este tipo de alimentos contienen más sal, grasas y aceites de mala calidad.
Eliminar el consumo de bollería, bebidas azucaradas y otros productos que contienen un exceso de grasas y azúcares.
No tomar bebidas alcohólicas. Además, para llevar a cabo una alimentación sana es necesario saber qué estamos comprando. Para ello, es importante leer las etiquetas nutricionales de los envases, ya que muchas veces no somos conscientes de la cantidad de alimentos insaludables que añadimos al carro de la compra y que contienen altos niveles de grasas saturadas, azúcares y sal, incluso cuando se trata de productos denominados light, que no siempre son bajos en calorías.
Menú saludable ¿De qué se compone?
La distribución de alimentos en menú para una alimentación sana sería el siguiente:
Desayuno: Una pieza de fruta, un lácteo y una rebanada de pan con aceite de oliva o una ración de cereales integrales.
Almuerzo: Una pieza de fruta o un lácteo.
Comida: Una ración de hidratos de carbono, legumbres o carne, una ración de verduras y fruta de postre.
Merienda: Una pieza de fruta o un lácteo.
Cena: Una ración de verduras, pescado o huevos y fruta postre.
Cocina saludable para una dieta sana y equilibrada
Una alimentación sana no es sinónimo de comidas aburridas y sin sabor. Te damos algunas ideas de comidas saludables para que disfrutes de comidas sanas y sabrosas.
Hamburguesas de pollo o pescado: Una manera diferente de comer productos recomendados en una alimentación sana y que admiten muchas combinaciones. Toma nota de la receta en este post.
Ensaladas: Además de las ensaladas de hoja verde, puedes hacerlas con legumbres o quinoa, acompañadas de verduras. Una forma muy sabrosa de comer un plato muy completo dentro de una alimentación sana.
Purés: Los purés y las cremas de verduras, como la calabaza, el puerro o el calabacín, son muy sencillos y apenas aportan calorías. Una opción excelente como primer plato en una comida o cena. Evita añadir nata y condiméntalos con tus especias favoritas.
Platos tradicionales: Los platos tradicionales son perfectamente compatibles con una alimentación sana. Los tradicionales guisos de legumbres con verduras, de carne o pescado, y los arroces como la paella de marisco o la paella valenciana son platos muy completos con unas excelentes propiedades nutricionales. ¿Listos para desintoxicaros del verano con estos hábitos de alimentación sana? Encuentra muchas más recetas, ideas y trucos para tus platos de cada día entrando en el blog de Choví.
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