Pero el hecho de pasar todo el día fuera de casa, no significa que debamos descuidar nuestra alimentación. Podemos planificar un estupendo día al aire libre acompañado de un delicioso menú que vaya acorde y que supla las necesidades nutricionales que nuestro cuerpo necesita.
A modo de recordatorio, no olvides el agua y los refrescos o zumos para mantenerte hidratado y evitar que el calor y el sol puedan provocar insolaciones o golpes de calor inesperados.
¿Ha llegado el momento y no sabes qué preparar? Decántate por recetas sencillas con platos de rápida elaboración, que se coman fríos, que puedan aguantar varias horas fuera del frío y que sean cómodos de comer en la toalla o en la tumbona.
Te proponemos una serie de recetas pensadas para llevar a la playa o a la piscina y que harán las delicias de grandes y pequeños cuando el hambre apriete. Pero primero deberás hacerte con los utensilios necesarios para tu jornada de diversión tales como unos táperes herméticos en los que transportar la comida y una neverita adecuada para mantener los alimentos a una temperatura correcta.
Si ya lo tienes todo preparado… ¡comenzamos!
¿Sano, fresco y nutritivo? ¡Ensaladas!
Las ensaladas son una de las mejores opciones para un día al aire libre porque son muy fáciles de preparar y muy apetecibles de comer a cualquier hora. Para que sea un alimento completo, no vale con una ensalada de lechuga sin más, ya que una jornada de sol y agua desgasta mucho.
Isasaweis acaba de publicar nuevo libro para Oberon, ¡No te compliques con la cena!, en el que explica más de 80 recetas para preparar cenas rápidas y reconfortantes después de la jornada. Y vamos a rescatar, para nuestro día de playa o piscina, una de estas sencillas recetas que nos propone Isabel en su obra.
Ensalada de ventresca con kiwi y aguacate
Ingredientes:
4 kiwis
4 tomates
1 aguacate
1 lata de ventresca de bonito
Aceite de oliva virgen extra, vinagre de Jerez, sal y pimienta negra.
Elaboración:
Lava bien los tomates, córtalos en rodajas y disponlos en el recipiente que usarás para transportar tu ensalada.
A continuación, pela los kiwis, córtalos igualmente en rodajas y haz lo mismo con el aguacate.
Por último, agrega la ventresca de bonito en lascas y procede a la elaboración del aliño.
Coloca en un frasco el aceite de oliva, el vinagre, la sal y la pimienta. Bátelo, ciérralo bien y guárdalo para servir a la hora de comer.
¿Ricos y fáciles de comer? ¡Sándwiches!
Los sándwiches son la opción más socorrida que existe cuando vamos a pasar el día fuera de casa, ya que se pueden comer en cualquier lugar. Pero aquí tienes una versión innovadora y diferente si estás cansado el típico sándwich mixto.
Para esta ocasión podemos cambiar la proteína animal por una proteína vegetal y el seitán es una deliciosa carne vegetal elaborada a base de germen de trigo, que posee multitud de cualidades nutricionales y un sabor muy agradable.
Es una de las fantásticas recetas presentes en el libro Humusmanía de los autores Cristina Martínez y Lluís Cortés, más conocidos por el blog de recetas veganas Delantal de alces.
Bocadillo de seitán y hummus
Ingredientes:
200 gr. de seitán
100 gr. de hummus clásico
Rúcula
5 tomates secos en aceite de oliva
1 barra de pan tipo baguette
Para la salsa de tomate:
50 gr. de tomate natural rallado
30 gr. de pimiento rojo
30 gr. de pimiento verde
Aceite de oliva, sal, pimienta y orégano
Elaboración:
Corta el seitán en filetes y pásalos por la plancha con un poco de aceite de oliva (mejor si es virgen extra). Luego abre la barra de pan por la mitad y unta una de las mitades con el hummus.
Para preparar la salsa de tomate limpia los pimientos y tritúralos junto a los tomates y el resto de ingredientes hasta que quede una masa homogénea y cremosa. Procede a continuación a untar la otra mitad del pan con la salsa que has hecho.
Coloca sobre el hummus un poco de rúcula, el seitán y finalmente los tomates. Cierra el bocadillo para partirlo en pedazos para cada comensal.
Por último, resérvalo en un lugar fresco hasta que llegue el momento de la comida.
¿Y de postre? ¡Mmmmm…!
Y para poner la guinda al pastel de este maravilloso día de verano al aire libre, nada mejor que un postre. Pero un postre que contenga algo de fruta para aportar vitaminas y azúcares naturales a nuestro organismo, ya que el agua y el sol nos hacen desgastar mucha energía.
A ver qué os parece esto…
Crema fría de melón y menta con crujiente de chocolate negro
Suena de lo más apetecible y la encontrarás en el libro La dieta… ¡que sea mediterránea!, de Margarita García Martín (Gastroamantes), en la que la autora comparte sus creaciones y sus recetas más celebres con una visión muy personal de la cocina mediterránea.
Ingredientes:
1 melón maduro y dulce
Unas 10 hojas de menta
150 gr. de chocolate negro
Elaboración:
Corta el melón en cuadrados e introdúcelos en la batidora junto con las hojas de menta para proceder a batirlo hasta lograr una crema suave y ligera.
Derrite el chocolate al baño maría y con la ayuda de una cuchara haz formas geométricas con el chocolate fundido sobre un papel sulfurado.
Procede a continuación a mantener las figuras en el frigorífico durante unos 15 minutos o hasta que le chocolate se haya endurecido completamente.
Recuerda conservar esta crema preparada en unos recipientes herméticos y mantenerlos en una nevera portátil y a la sombra para que se mantengan bien fresquitos.
Y bien, ¿cuál de las recetas propuestas ha tenido más éxito entre tus comensales? ¡Cuéntanos!
Fuente: este post proviene de Cocina con Oberon, donde puedes consultar el contenido original.
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