La cocina zero-fiendly se basa en el uso responsable de los alimentos intentando desperdiciar lo mínimo, y en los procesos que tienen lugar antes, durante y después de cocinar. Cosas tan simples como hacer la compra de forma responsable, fijarnos en el envoltorio de los productos, no tirar sobras innecesariamente, o limpiar con productos respetuosos con el medio ambiente.
“El Zero Waste no busca la perfección, ¡centrémonos en lograr cada día un poquito más! Con unos simples pasos podemos hacer una gran contribución”, afirma Sebastian y recomienda tener presente la regla de las 5R que consisten en:
RECHAZAR objetos que tras un solo uso van a ir a la papelera como las bolsas de plástico de la fruta.
REDUCIR, al final cuantas menos cosas necesitas menos basura generas.
REUTILIZAR y encontrar así un nuevo uso a aquellos productos que pensamos que ya no sirven para nada.
REPARAR, arreglar y alargar la vida de los objetos que ya poseemos.
RECICLAR, como última opción.
La cocina es uno de los ámbitos de nuestra vida en los que podemos hacer una mayor aportación, ya que una enorme parte de los desperdicios que generamos provienen de nuestras acciones y compras relacionadas con la alimentación. ¡La energía desperdiciada durante la producción de alimentos representa más del 10% del total de la energía consumida a nivel mundial! Eso sumado la huella ambiental por generación de gases de efecto invernadero y el desperdicio de recursos naturales utilizados durante su producción, así como los envases creados para su comercialización.
Estos aspectos se podrían reducir si empezamos a incorporar pequeños hábitos en nuestro día a día, como comprar de manera responsable, utilizar productos de temporada, organizar las comidas semanales con un buen batchcooking, aprender a conservar y congelar los productos para que no se estropeen, y un largo etcétera de acciones zero-friendly.
Cocina Zero Waste es el libro en el que nos enseña cómo comprar de forma responsable, la manera más eficiente de conservar los alimentos en perfecto estado y nos descubre más de 80 recetas de cocina creativa para no desperdiciar ni un gramo de los alimentos que tenemos en casa bajo el lema: ¡Compra bien, cuídalo mejor y aprovéchalo todo!
Y para que veas lo fácil que es hacer una riquísima receta gracias a las sobras de otras comidas no te pierdas, en el libro encontrarás muchas más, esta de Falafel de restos de habas con salsa de yogurt.
Ingredientes
250 g de habas cocidas en buen estado 1 cucharadita de levadura en polvo
2 cucharadas de pan rallado
1 manojo de cilantro fresco
1 manojo de hierbabuena fresca
1 cucharada de comino molino Semillas de sésamo
1/2 cebolla mediana
1 diente de ajo
Sal y pimienta
Aceite para freír
Utensilios
Bol, cuchillo, tabla para cortar y sartén
Pela la cebolla y los dientes de ajo y pícalos muy finos. Pica también muy fino el cilantro fresco y la hierbabuena. Aplasta los garbanzos con la ayuda de un tenedor e incorpora la cebolla, el ajo y las hierbas picadas. Agrega también el comino, la levadura en polvo, el pan rallado y mezcla con las manos. Rectifica con sal y pimienta y deja reposar durante media hora. Forma albóndigas, aplástalas ligeramente (el falafel no es totalmente redondo) y rebózalas ligeramente en semillas de sésamo. Agrega aceite para freír a una sartén o freidora a fuego fuerte e cocina las bolas de falafel hasta que estén doradas. Sírvelas caliente acompañadas de salsa de yogur.
Salsa de yogur para falafel o kebab
Incorpora 125 g de yogur natural, 1 diente de ajo, el zumo de medio limón, 5 hojas de hierbabuena, un chorrito de aceite de oliva, una pizca de pimienta negra y sal, y tritura.