2 raciones
INGREDIENTES
300 g de cebolla
20 g de niter kibbeh (aunque cambiarán los sabores, podemos sustituirlo por mantequilla y, opcionalmente, añadir alguna de las especias que lleva esta mantequilla clarificada y especiada: canela, orgégano, comino, cilantro, cúrcuma...)
350 g de pechuga de pollo
2 cucharadas de zumo de limón
2 dientes de ajo
1 cucharada de jengibre fresco
2 cucharadas de mezcla de especias berbere etíopes (ver receta)
50 ml de vino blanco
1 cucharada de té de miel
125 ml de caldo de pollo (o agua y 1/2 pastilla de avecrem)
2 huevos cocidos (me olvidé)
ELABORACIÓN
Triturar la cebolla en un procesador de comida o con la Thermomix.
Pocharla a fuego muy bajo durante media hora con 20 g de niter kibbeh. Como indicamos, puede sustituirse por mantequilla, pues el plato llevará otras especias que le darán sabor. En la Thermomix: 30 min/vel. cuchara/75º.
Mientras se pocha la cebolla, cortamos en cubos la pechuga de pollo y la dejamos macerar con dos cucharadas de limón.
Trascurrida la media hora, añadimos a la cazuela o a la thermomix el ajo y el jengibre picados y las dos cucharadas de especias berbere.
Echamos otros 10 g de niter kibbeh y seguimos pochando durante 20 min. Thermomix: 20 min/vel. cuchara/75º.
No me gusta hacer los asados en la thermomix, pues me parece que deshace mucho la carne, así que ya continué en la cazuela. Así que una vez tengamos el sofrito listo en la pota, añadimos 50 ml de vino blanco, 1 cucharada de té de miel y 125 ml de caldo de pollo.
Ponermos a hervir unos minutos a fuego fuerte para que se reduzca el vino.
Si estuviéramos haciéndolo con la thermomix, antes de añadir la salsa a la cazuela, echamos un poco de mantequilla, aceite o niter kibbeh y sellamos el pollo una vez lo hayamos escurrido del zumo de limón. Si no usamos thermomix, lo haremos en otra cazuela.
Cuando se reduzca el vino, echamos el pollo con la salsa y dejamos cocinar a fuego bajo durante 45 minutos. Tapado y revolviendo de vez en cuando.
Cuando esté listo, le añadiremos dos huevos cocidos pelados y serviremos el plato. He hecho el pollo el día antes de comerlo y olvidé, después, preparar los huevos cocidos, por eso no aparecen en las fotos, pero seguro que le vienen bien al plato, sobre todo si lo hacéis más picante.
Hemos comido el doro wat con pan injera, ensalada etíope, fasolia y queso.