2 raciones
INGREDIENTES
150 g de cebolla
1 diente de ajo
1 cucharada de té de jengibre fresco majado
1 cucharada de café de cilantro seco
1/2 cucharada de café de comino
1 cucharada sopera de ras el hanout
250 g de pechuga de pollo
2 zanahorias
300 ml de caldo de pollo
2 orejones
30 g de pasas
4 ciruelas pasas
200 g de calabacín cortado en trozos grandes
10 g de cilantro fresco picado
ELABORACIÓN
Cortamos la cebolla en juliana y la pochamos en dos cucharadas de aceite a fuego bajo durante diez minutos o hasta que comience a transparentar.
A los cinco minutos, añadimos el ajo y el jengibre majados y revolvemos.
Cuando esté listo, echamos las especias apartando el cazo del fuego. Revolvemos y metemos el pollo troceado y las zanahorias peladas y cortadas en pedazos grandes.
Volvemos al fuego y lo subimos.
Revolvemos de nuevo y añadimos el caldo (o agua con una pastilla de avecrem). El caldo tiene que cubrir, al principio todos los ingredientes.
Lo dejamos a fuego fuerte hasta que comience a hervir y bajamos el fuego para que se cocine despacito.
Cuando transcurran diez minutos, añadimos el resto de los ingredientes, comprobamos la sal y, si es necesario añadimos un poco.
Dejamos cocinar a fuego lento durante otros veinte minutos o hasta que la zanahoria esté cocida. Puede tardar unos veinte minutos o media hora más, dependerá del tamaño de los trozos.
Servir acompañado de cuscús.