6 raciones
INGREDIENTES
Masa
1 huevo
75 ml de leche
25 g de azúcar
1 cucharada de té de sal
1 sobre de levadura seca de panadería
55 ml de agua
55 g de mantequilla
400 g de harinaRelleno
200 g de carne picada de ternera
1 cebolla
2 dientes de ajo
6 hojas de col (pequeñas)
1 clavo majado
1 pizca de canela
1/2 cucharada de café de pimienta
1 pizca de sal
1/4 cucharada de café de nuez moscada
1 cucharada sopera de salsa worcestershire
1/2 cucharada de café de Bovril
6 lonchas de queso (Cheddar)
ELABORACIÓN
Lo primero que tendremos que preparar será la masa. Para ello, disolver el azúcar y la levadura en agua templada.
Añadir la leche, la sal y el huevo y mezclar.
Por último, vaya añadiéndose la harina de poco en poco, pues puede necesitar más o menos de la indicada.
Colocar la masa hecha una bola en un bol y dejarla reposar hasta que doble su volumen (dependerá del calor, pero entre una o dos horas).
Mientras se deja subir la masa, prepararemos el relleno. Lo primero que tenemos que hacer es picar la cebolla y el ajo para después pocharlo con cuatro cucharadas de aceite.
Tocear la col, quitándole los tallos, y cuando esté la cebolla transparente, añadirla a la sartén, cocinala hasta que ablande, durante aproximadamente 20 min.
Una vez tengamos la col blanda, echar las especias (un clavo, una pizca de canela, una poco de pimienta, una pizca de sal moscada y la sal), una cucharada sopera de salsa worcestershire y una cuchara de café de Bovril.
Finalmente, añadimos la carne picada y revolvemos para que se separe, pero solo durante unos minutos, no hace falta que quede cocida del todo.
Pasemos ahora a montar los bollinos. Precalentar el horno a 180º. Dividimos la masa en 6 bolas.
Extendemos la masa de forma circular y ponemos en el centro una loncha de queso y una sexta parte del relleno.
Vamos cerrando llevando la masa hacia el centro hasta procurando que quede bien cerrado.
Colocamos en una bandeja de horno sobre un papel antiadherente. No crecen demasiado, así que no hace falta alejarlos mucho.
Por último, introducir en el horno a 180º durante 20 min.
Servir calientes.
Se mantienen muy bien durante dos o tres días en la nevera.
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