El jamón no modifica el peso corporal y disminuye los lípidos plasmáticos beneficiando al corazón, motivos que convierten a este producto en más que saludable. Por lo tanto, el jamón ibérico puede ser un alimento a incluir en nuestra dieta sin ningún problema, siempre que lo consumamos con moderación.
Generalmente siempre se ha creído que el jamón ibérico engorda por la grasa que él mismo desprende; sin embargo esta idea es totalmente errónea. No engorda. Es el embutido más saludable y con menos grasas saturadas que existe en el mundo entero.
Tiene entre 100 y 125 KCal por cada ración de 50 gramos, por lo que es óptimo incluso en dietas hipocalóricas, tomado siempre con moderación.
100 gramos de jamón ibérico equivalen a 7 gramos de grasa saturada, es decir, un 2,8% de la energía ingerida, muy por debajo del 7% recomendado.
-Proteínas: contiene gran cantidad de proteínas y además de muy buena calidad.
-Grasas: aunque tiene contenido graso, éste está muy bien equilibrado.
La calidad de su grasa es excelente, predominando en su composición el ácido oleico, bueno para la salud, con niveles superiores al 50%. Esto facilita la producción de colesterol HDL (colesterol "bueno") en el organismo, reduciendo al mismo tiempo el colesterol LDL (colesterol "malo"). Por lo tanto, su consumo moderado ayuda a mantener unos buenos niveles de colesterol y previene las enfermedades cardiovasculares.
EL jamón ibérico de bellota, además de ser un alimento valido para cualquier tipo de dieta y que no engorda, siempre que se coma con moderación, tiene unas cualidades nutricionales excepcionales y es una fuente muy importante de proteínas y vitaminas.
El jamón ibérico de bellota tiene:
-Vitaminas: el jamón ibérico ofrece un generoso aporte de vitaminas del grupo B, especialmente B1, B6 y B12 y ácido fólico muy beneficiosas para el sistema nervioso y el buen funcionamiento del cerebro. Tan sólo 100 gramos de jamón proporcionan el 24% del consumo diario recomendado de estas vitaminas. Asimismo tiene un alto contenido de vitamina E, y por tanto actúa como un poderoso antioxidante.
-Minerales: es rico en minerales como el Cobre (Cu), esencial para los huesos y cartílagos, Calcio (Ca), Hierro (Fe), Zinc (Zn), Magnesio (Mg), Fósforo (P) y Selenio (Se), muy ligado este último a procesos ANTIENVEJECIMIENTO
-Digestibilidad: el jamón ibérico presenta fácil digestibilidad, debido a que es pobre en colágeno. Por la maduración de la carne y por la acción de las proteasas se fragmentan las proteínas en aminoácidos. Nuestro aparato digestivo puede degradar los aminoácidos con mayor facilidad.
-Ácido úrico: la carne de cerdo es una de las carnes con menor cantidad de bases púricas (sustancias que al metabolizarse en el organismo dan lugar al ácido úrico), siendo un alimento totalmente seguro para personas que padezcan gota.
-Salud cardiovascular: hay estudios que demuestran que un consumo moderado de jamón ibérico disminuye los niveles de colesterol, contribuye a disminuir la presión arterial, minimiza las posibilidades de sufrir trombos y ayuda a reducir los lípidos plasmáticos.
Como se ha podido ver el jamón ibérico es un embutido saludable que en cantidades razonables tiene unos grandes beneficios para nuestro organismo. Además, si un jamón es ibérico de bellota puede ser consumido durante el embarazo. ya que está bien curado y no supone riesgo alguno.
Por último recordarte que un buen amante del jamón ibérico nunca debe eliminar el tocino del mismo por el miedo a engordar, ya que es la parte más sabrosa y le da al jamón un sabor único, además de ser una de las partes más nutritivas.