Hoy llega al blog una ensalada con nombre propio. Una ensalada con historia, y como siempre conflictiva respecto a su creador o creadores. Es curioso como hay tantas recetas con un origen incierto, y disputas entre varios cocineros por su autoría. Ésta, en concreto, fue patentada por el chef César Cardini en 1948, aunque lo que realmente patentó fue la salsa. Como siempre podemos encontrar muchas variantes para una misma receta. Elementos seguros en todas son la lechuga romana, los picatostes y el queso parmesano, y anchoas...aunque parece ser que su propio autor no era partidario de incluir estas últimas en la receta. Precisamente las anchoas han sido las que me han frenado durante años para preparar esta ensalada. Como sabéis de la lista de ingredientes que no me gustan las anchoas están en cabeza. Por ello, después de más de 900 recetas publicadas en el blog hoy llega la primera que incluye las anchoas entre su ingredientes. De todas formas, en la ensalada son un ingrediente más, por lo que si no me gustan no me las tomo y ya está, aunque suelten un poco de su jugo en la lechuga....pero eso no molesta. No es la primera vez que la había probado en un restaurante, eso si, apartando las anchoas. En cuanto a la receta, he usado la de un libro de ensaladas que tengo hace varios años y que me ha servido de inspiración para muchas de las recetas publicadas en el blog, su nombre es
Ensaladas, el sabor del verano en todas las estaciones, un libro comercializado por la editorial Parragón y que podéis encontrar a un precio de alrededor de 12 euros
INGREDIENTES:
1 huevo grande
1 lechuga romana
6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra (yo le he puesto variedad Picual)
2 cucharadas de zumo de limón
8 filetes de anchoa en conserva escurridos y en trozos (yo no me he esmerado en buscar unas estupendas, al fin y al cabo no me las iba a comer, aunque si os gusta, cuanto más calidad tengan, más realzarán vuestra ensalada)
100 gr. de virutas de queso parmesano o grana padano
Sal
Pimienta
Para los picatostes de ajo:
4 cucharadas de aceite de oliva
2 dientes de ajo
5 rebanadas de pan blanco cortadas en dados
PREPARACIÓN:
Llevamos agua a ebullición en un cazo pequeño. Mientras tanto, preparamos los picatostes. Para ello calentamos el aceite en una sartén de fondo grueso. Añadimos los dientes de ajo y el pan, freímos sin parar de remover, de cuatro a cinco minutos o hasta que el pan esté crujiente y dorado. Retiramos de la sartén con una espumadera y dejamos escurrir sobre papel de cocina.
Mientras se fríe el pan añadimos el huevo al agua hirviendo y cocemos sólo un minuto. Retiramos del cazo y lo reservamos. Repartimos las hojas de lechuga cortadas y limpias en una ensaladera. Mezclamos en un bol el aceite y el zumo de limón, salpimentamos. Cascamos el huevo y batimos junto con el aliño. Vertemos todo sobre la lechuga, mezclándola bien, añadimos los picatostes y las anchoas cortadas, mezclamos de nuevo la ensalada y servimos con las virutas de queso por encima.
Aunque esta semana es un poco lluviosa ya van apeteciendo las ensaladas, sustituyéndolas por otros platos mucho más calóricos. Por lo que os animo a que pongáis ensaladas en vuestros menús.
Feliz miércoles.
Lidia.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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