Que variedad y que colorido que tienen todas las ensaladas. Nos encantan estos platos que alegran la mesa solo con verlas y que al probarlas, nos llenan la boca de sabores frescos y deliciosos. Además, como son preparaciones tan versátiles que podemos incluir casi cualquier ingrediente que nos agrade, no tenemos excusa para no cuidarnos y comernos una buena ensalada de forma habitual.
Aunque también hay que tener mucho cuidado con las ensaladas, sobre todo si las preparamos y consumimos con el fin de ayudarnos a perder algún kilito, ya que no todas las ensaladas son igual de sanas.
Hoy día tenemos mucha costumbre de llamar a casi cualquier plato que lleve "algo verde" y no este cocinado, ensalada. Pero hay que saber diferenciar aquellas que son saludables y cuales no tanto. Con esto no queremos decir que no se pueden comer, solo que no todas nos ayudaran por igual en nuestras dietas. Por ejemplo, no es lo mismo una ensalada de lechuga y tomate con aceite de oliva, que una ensalada cesar con un filete de pollo rebozado y su salsa cesar. Entendéis la diferencia, ¿verdad? Todas las ensaladas son deliciosas, ya sean de pasta, con arroz, con salsas..., pero todas diferentes entre si.
La que hoy os presentamos, es una ensalada de las que podríamos incluir en aptas para dietas, ya que no lleva ingredientes grasos, y que nos ayudará a controlar un poquito nuestra salud, ya que es un acompañamiento ideal y muy sano para cualquier otro plato.
Lo que diferencia un poco esta ensalada del resto que seguramente preparéis con frecuencia en vuestras casas, es el aliño o vinagreta: lo prepararemos con limón y miel. Una combinación muy interesante para un plato tan fresco como la ensalada, ¿ no os parece? Y el sabor tan intenso que le dará a nuestro plato no tiene igual.
Sin entreteneros mas, vamos a dar comienzo a la receta. Sencilla y rápida. ¿Empezamos? A por los delantales y a cocinar!
Ingredientes(2 personas):
Lechuga
1 tomate
1 pepino
1 cuña de queso semicurado (o el que mas os guste)
Jamón York en tacos
1 huevo cocido
Maíz
Para la vinagreta
2 cucharadas de zumo de limón
1/2 cucharada de ralladura de limón
1/4 de vaso de aceite
2 cucharadas de vinagre
1/4 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de orégano
1 cucharada de miel
Una pizca de pimienta negra
Preparación:
Lo primero (y que es esencial en cualquier ensalada) será lavar bien tanto la lechuga, como el tomate y el pepino.
En una ensaladera, echaremos la lechuga partida en trozos, al igual que el tomate y el pepino una vez lo hayamos pelado.
Partimos el jamón york (si lo teníamos en una barra), al igual que el queso. Lo echamos en la ensaladera junto con el maíz.
Cortamos el huevo en cuartos y lo colocamos encima del resto de ensalada.
Para preparar la vinagreta, uniremos todos los ingredientes indicados en un bol, y lo echaremos encima de la ensalada justo antes de servirla.
Cinco pasos. Ya veis lo sencillo que resulta cuidarnos, y de un modo delicioso. Os animamos a todos a que lo comprobéis en vuestras casas!
Un saludo a tod@s y buen provecho!