Hemos elegido pimientos pequeños de colores, pero puede hacerse con tiras de pimientos más grandes. Lo único importante es que haya al menos tres colores distintos de pimientos.
El resultado es un plato impactante de inicio por su intenso colorido, y muy sabroso.
Ingredientes:
1/2 kg. de espaguetis.
3 ajos.
1 cebolla.
600 gr. de pimientos variados.
sal y pimienta.
aceite de oliva y perejil.
queso parmesano rallado.
Ponemos 5 cucharadas de aceite en una sartén amplia y rehogamos en el el ajo laminado y la cebolla en medias rodajas no demasiado finas.
A los 3 minutos añadimos los pimientos despepitados y cortados como más nos gusten. A nosotros nos gusta dejarlos bastante grandes, de hecho si os fijáis, hemos utilizado los pimientos de padrón enteros. Salpimentamos y si hace falta, añadiremos dos cucharadas más de aceite.
Mientras nuestros pimientos se van cocinando a fuego vivo durante unos 10 minutos, cocemos los espaguetis en agua hirviendo con un buen puñado de sal.
Debemos seguir las instrucciones del fabricante respecto al tiempo de cocción pues unas pastas se hacen antes que otras dependiendo de marcas, grosor, etc… pero debemos dejarlas algo “al dente” pues los últimos minutos de cocción se producirán en la sartén con los pimientos.
Cuando tengamos cocidos los espaguetis, los añadimos a la sartén, añadimos un poco de pimienta negra recién molida y dejamos que se integren bien los sabores durante 3 – 5 minutos. Rectificamos de sal si es necesario.
Servimos bien caliente espolvoreado con perejil picadito y acompañado de un cuenco con queso parmesano rallado para que los comensales lo añadan a su plato cada uno a su gusto.