Lo comparto con vosotros porque en casa nos parece que queda riquísimo, de hecho es uno de los platos favoritos de mi hijo y de los pocos que ha aprendido a hacer él mismo. Será por algo!
Ingredientes
300 gr. de espaguetis.
1 berenjena.
2 cebolletas.
3 o 4 salchichas tipo Viena.
200 ml. de nata (crema de leche) líquida.
200 ml. de leche.
Pimienta negra y sal.
Nuez moscada.
Aceite de oliva suave.
Queso parmesano recién rallado.
Empezamos cociendo los espaguetis en abundante agua con sal. Debemos dejarlos algo duritos “al dente” como dicen los italianos pues vamos a calentarlos después en la salsa durante 3 minutos más.
Mientras cuecen preparamos el resto de ingredientes. Pelamos a rayas las berenjenas, las cortamos en cubos de 3 centímetros y las salamos para que expulsen el amargor. Pelamos las cebolletas conservando la mayor parte del tallo y cortamos las salchichas.
En una sartén bien amplia (deben cabernos después los espaguetis en ella), ponemos 3 cucharadas de aceite de oliva suave y rehogamos en él la cebolleta (podemos utilizar cebolla si no es temporada de cebolleta) cortada no demasiado fina. Secamos las berenjenas, pues habrán llorado debido a la sal, y las incorporamos a la sartén. Salpimentamos al gusto y dejamos hacer a fuego medio durante 8 o 10 minutos.
Añadimos después las salchichas y dejamos que se cocine todo junto durante 3 minutos más.
Agregamos la nata (crema de leche) y la leche a las verduras y ponemos nuez moscada a nuestro gusto. Mientras esperamos que el conjunto empiece a hervir, probamos y añadimos nuez moscada, sal o pimienta si fuera necesario.
Cuando alcance el punto de ebullición, agregamos los espaguetis que tendremos reservados, bajamos el fuego para que no hierva nuestra salsa y dejamos que se mezclen bien todos los sabores durante 3 minutos más mientras removemos continuamente.
Servir inmediatamente acompañado de unas hojas verdes. Yo le pongo lo que tengo, le va bien la rúcula, el perejil o la albahaca.
Servir queso parmesano rallado en cuenco a parte para que cada comensal se sirva lo que desee.
Fuente: este post proviene de Cocina sin Carné, donde puedes consultar el contenido original.
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