INGREDIENTES
- 300 gr. de Espinacas
- 100 gr. de Queso light para untar
- 100 gr. de Queso Gorgonzolla
- Nueces
- 2 Cucharadas de Aceite de Oliva
- 1 Cucharada de Maizena
ELABORACION
Para esta receta puedes elegir entre espinacas frescas o congeladas, aunque yo siempre os recomiendo los productos cuanto más frescos mejor.
Cuece las espinacas en una olla con agua y sal hasta que su volumen se reduzca a la mitad (unos 15 minutos). Escurre el agua y déjalas reposar en el escurridor para que suelten bien todo el líquido mientras preparas la crema de gorgonzolla.
En una sartén o en un cazo antiadherente calienta un par de cucharadas grandes de aceite de oliva y disuelve en ellas una cucharada de maizena, con el fuego a la mitad de potencia. Diluye en ese mismo cazo el queso de untar (tipo Philadelphia) y el gorgonzolla.
Para que se integren mejor y más rápido los quesos es recomendable que los troceéis lo máximo posible antes de ponerlos al fuego. Remueve sin parar hasta que se forme una crema uniforme y espesa. Al ser el Gorgonzolla un queso azul, es posible que en la crema quede algún grumo oscuro que le resta un poco la estética al plato, si es así, pasa la mezcla por la batidora y listo.
Monta en un plato hondo las espinacas, bien escurridas, una generosa cantidad de crema de gorgonzolla por encima y espolvorea nueces por todo el plato a tu gusto.