Esta tarta salada es muy parecida a la "quiche", pero la diferencia principal, sobre todo, es que lleva bechamel en el relleno, en lugar de nata (crema de leche), lo que le da una cremosidad muy diferente.
Hoy vamos a hacer una flamiche de puerros y bechamel, con la masa quebrada casera.
La base de la flamiche es muy variada, como lo puede ser también la de la quiche, o cualquier coca o torta. Puede estar hecha de masa hojaldrada, quebrada, brisa, masa de pan.....y puede ser dulce o salada.
Las flamiches se pueden servir como aperitivo o entrante de una comida, también como plato principal, o para cualquier momento del día acompañada de una cerveza o vaso de vino.....o lo que prefieras.
Ingredientes
Para la masa:
200g. de harina.
4g. de sal.
100g. de mantequilla fría.
64g. de agua.
Para la bechamel:
200ml. de leche evaporada.
30g. de mantequilla.
30g. de harina.
Sal.
Nuez moscada.
Para el relleno:
1 puerro.
1/2 cebolla.
30g. de mantequilla.
70g. queso rallado.
1 huevo y 1 yema.
Sal.
Pimienta molida.
Modo de hacerlo:
La masa quebrada:
La masa vamos a hacerla nosotros en casa, pero siempre puedes comprarla en el supermercado si te es más cómodo. Pero tienes que saber que la que venden queda más fina que la casera.
En un bol mezcla la harina y la sal.
Ahora añade la mantequilla fría cortada en trocitos y mezcla pellizcando con las yemas de los dedos hasta que quede arenosa.
Añade el agua y mezcla bien hasta que se forme una masa compacta.
Haz una bola con la masa, envuelve en papel film y guarda en la nevera 1 hora, más o menos, mientras preparas el relleno y la bechamel.
La bechamel:
Vamos a preparar una bechamel espesa.
Pon una sartén al fuego y añade la mantequilla.
Cuando esté disuelta echa la harina y remueve bien hasta que cambien de color.
Ves echando la leche evaporada y removiendo a la vez para que no queden grumos.
Cocina a fuego lento hasta que la bechamel se separe de los lados de la sartén.
El relleno:
Limpia el puerro y córtalo en rodajitas.
Pela y corta la cebolla en trocitos.
Pon una sartén al fuego y rehoga las verduras en la mantequilla a fuego lento.
Sazona con sal y pimienta, tapa la sartén y cuece hasta que estén tiernas las verduras.
Aparta del fuego y añádela a la sartén con el puerro y la cebolla.
Añade ahora el huevo, la yema y el queso rallado, mezcla bien.
Montaje:
Precalienta el horno a 200º.
Estira la masa con el rodillo sobre la mesa enharinada, y dale forma redonda.
Con la ayuda del rodillo, lleva la masa al molde untado de mantequilla, y cubre la base y los lados. Recorta la masa que sobre y guárdala para adornar.
Pincha con un tenedor y hornea unos 10 minutos.
Horneado:
Rellena la masa horneada con toda la mezcla de bechamel y verduras.
Haz unas tiras con la masa sobrante y adorna la flamiche, pinta con huevo batido.
Hornea a 200º con calor arriba y abajo durante unos 15 minutos, o hasta que esté dorada.
Sirve caliente o tibia.
La flamiche es una receta con muchas variaciones, ya que puedes ponerle los ingredientes que prefieras. Espero que te guste.