Este mes, por ser un mes de muchas fiestas, no hay reto del Asaltablogs normal, sino que hemos hecho un Asaltablogs invisible. Así que yo tengo que asaltar a un blog y alguien me asaltará a mí. ¡Qué misterio!
El blog que me ha tocado asaltar es AZAFRANES Y CANELAS y entre la variedad de recetas ricas que tiene, he elegido este FLAN DE HUEVO CASERO
Yo lo he hecho sin lactosa, pero se puede hacer con leche y nata (crema de leche) normal. Ambos están igual de ricos.
INGREDIENTES (para 4 personas):
- 160 ml de leche (sin lactosa)
- 180 ml de nata (crema de leche) líquida (sin lactosa)
- 2 huevos
- 4 yemas de huevo
- 75 gr de azúcar
- 1 cucharadita de azúcar avainillado
- la piel de medio limón
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 180º, con calor arriba y abajo.
Primero hacemos el caramelo líquido. para ello ponemos al fuego 3 cucharadas de azúcar y una cucharada de agua. Lo dejamos cocinar hasta que se forme el caramelo.
Por otro lado ponemos en un bol las yemas y los huevos . Agregamos el azúcar y el azúcar vainillado y lo mezclamos todo bien con las varillas hasta que la mezcla sea homogénea y blanquee un poco. Reservamos.
A continuación, vertemos en un cazo la nata (crema de leche) y la leche. Yo he añadido la cáscara del limón para que infusione un poco y le de un toquecito de sabor. También podríamos haber echado 1 ramita de canela. Según nuestros gustos. Dejamos al fuego suave hasta que esté a punto de hervir. Entonces retiramos del fuego, dejamos templar un poco, no mucho, y lo vamos agregando poco a poco a la mezcla de huevos. Debemos ir incorporando la leche y nata (crema de leche) muy lentamente a la vez que vamos removiendo con las varillas, para evitar que el huevo se cuaje con el calor.
Una vez tenemos lista la mezcla, echamos en el fondo de los moldes el caramelo líquido y los rellenamos con la mezcla.
Los colocamos en una bandeja de horno un poco profunda y echamos agua hasta cubrir unos 2 dedos de los moldes. Tapamos cada molde con papel de aluminio y dejamos que se cocine en el horno al baño maria durante 45-60 minutos, dependiendo del horno. Para saber si están listos, los pinchamos con un palillo en el centro. Si aún estuvieran un poco líquido, los dejamos más tiempo.
Yo he puesto el horno a 180º con calor arriba y abajo.