El único cambio que he hecho han sido las escamas de guindilla, a Maite se las trajo su madre de italia, y la verdad es que me pillaba un poco lejos ir a comprarlas allí, así que en el mortero machaqué una guindilla seca entera y otra sin semillas. Ojo!!! Si no os gusta el picante usad menos cantidad u os arderá la boca como le paso a mi marido, que tuvo que salir corriendo a beberse un vaso de leche para calmar el picor.
Los que me seguís ya sabéis que participo todos los meses en este maravilloso reto que organiza mi amiga Marga del blog Azafranes y Canelas, si estás interesado en apuntarte pincha aquí, verás que es un reto super divertido, y en el que conocerás a gente maravillosa.
Vamos a por la receta.
Ingredientes (para 4 focaccias individuales):
Para la masa:
500gr de Harina de fuerza
7gr de levadura seca
10gr de sal
50gr de aceite de oliva
320gr de agua tibia
1 c/c de azúcar
Para el relleno:
3 Peras
1 Cebolla
2 Guindillas
Aceite de oliva
Sal en escamas
Primero nos ponemos con la masa, para ello, en un bol grande mezclamos la harina, la levadura, la sal y el azúcar.
Agregamos el aceite y el agua tibia y mezclamos bien. Primero en el bol y luego pasamos a una superficie para trabajar mejor la masa hasta que ésta sea elástica y homogénea. Hacemos una bola con la masa y la dejamos reposar 2 horas tapadas con film, doblará su volumen.
Cortamos la masa en 4 porciones (o la dejamos entera), en mi caso la corté para hacer una sin guindilla para mi bichillo, que el picante no le gusta mucho, normal, con 5 años.
Engrasamos con aceite la bandeja del horno (en mi caso el papel de horno) y colocamos la masa, la vamos presionando de dentro hacia fuera para ir dándole la forma deseada. Dejamos reposar 40 minutos.
Laminamos finamente la cebolla y la pera. La repartimos por la masa, presionando un poco para que se hundan, regamos con aceite, espolvoreamos la guindilla y un poco de sal y dejamos reposar otros 30 minutos.
Precalentamos el horno a 220º y horneamos durante 20 minutos aproximadamente.
Podéis comerla fría o caliente, esta deliciosa de cualquier forma.
Mil gracias Maite por dejarme entrar en tu cocina, aunque ya sabes que entro con bastante frecuencia.