Cuando mis hijos eran más pequeños probaron unas galletas de avena de Mercadona, que por una parte estaban bañadas en chocolate con leche. Les gustaron mucho, pero los que me leéis asiduamente sabéis que intento que coman los menos alimentos procesados posibles. Así que me animé a “experimentar” con las galletas de avena caseras. Después de muchas galletas y muchos ajustes de cantidades, esta es finalmente la receta con la que siempre las hago. Podéis comerlas tal cual, pero os aviso de que bañadas con un poco de chocolate por una de sus caras quedan… ¡hummm!
Las galletas de avena son sanas, ricas y muy fáciles de hacer. Además, aguantan muchos días bien conservadas. La avena es uno de los llamados “súper alimentos” que están llenos de nutrientes beneficiosos para nuestro organismo. Contiene más proteína que otros cereales, como el maíz o el trigo, además de ayudar a reducir el colesterol LDL (el conocido como “colesterol malo”) y prevenir y mejorar trastornos intestinales.
A mis hijos les encanta ayudar a hacer galletas en casa. Se lo pasan genial haciendo bolitas con la masa, aplastándolas para darles forma y viendo cómo crecen en el horno. Y no os digo el olor tan increíble que sale de la cocina cuando se hornean… ¿Necesitáis más razones para hacerlas? ¡Vamos, seguro que no os arrepentís!
Para hacer estas increíbles galletas de avena y chocolate necesitaréis los siguientes ingredientes:
220 gr de copos de avena.
130 gr de harina integral.
190 gr de azúcar moreno.
1/2 sobre de polvo de hornear (levadura tipo Royal).
1 pellizco de sal.
16 gr de azúcar vainillado o una cucharadita de esencia de vainilla.
2 huevos L ó 3 huevos M.
50 gr (dos cucharadas) de miel.
120 gr de aceite de girasol o de oliva virgen extra muy suave.
En un bol, añade todos los ingredientes y mezcla muy bien hasta obtener una masa uniforme. Precalienta el horno a 200º con calor arriba y abajo. En la bandeja del horno forma bolitas separadas entre sí (¡con el calor crecen, cuidado!). Aplástalas con los dedos un poco y dales forma redondeada(mójate los dedos un poco en agua para que no se pegue la masa). Hornea a 200º unos 10/12 minutos (no es necesario más, porque al enfriar se endurecen un poco). Sácalas con cuidado y deja que enfríen sobre una rejilla.
Si tienes Thermomix, Monsieur Cuisine Plus u otro robot, puedes no solo mezclar los ingredientes, sino también triturar un poco la avena, si la prefieres así. Para ello pon la avena en el vaso y segundos/velocidad 4. Después añade el resto de los ingredientes y amasa 2 minutos (velocidad espiga en Thermomix).
Puedes tomarlas tal cual o bañar la parte más plana en chocolate de cobertura. Para ello, trocea una tableta de chocolate de cobertura y derrítelo en el microondas con una nuez de mantequilla sin sal. Con una cuchara sopera, vierte el chocolate sobre cada galleta y deja enfriar en la rejilla.
Verás que nadie en casa puede resistirse a estas galletas. Y duran además mucho tiempo guardadas en una lata. Bueno, eso con mucha fuerza de voluntad o si consigues esconderlas. Nos vemos en la próxima receta. Y no olvides compartir tus comentarios aquí mismo o en nuestro grupo de Facebook.
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