Del café os tengo que decir que es bueno, muy bueno. Quitando los descafeinados, que para mi gusto son excesivamente suaves, los expressos son de sabor intenso, excelentes. Vienen envueltos individualmente. Las cápsulas son de plástico en vez de aluminio, pero la máquina ni se ha enterado del cambio.
Y lo que sí que es cierto es que, con la muy buena calidad que tienen todos los que he probado, económicamente hablando son muy interesantes. 12 variedades diferentes y a un precio que varía entre 2,40 y 2,50 ? cada paquete de 10 cápsulas. Si hacéis un pedido superior a 45 ? los gastos de envío no tendréis que abonarlos y tendréis vuestras cápsulas en 24 horas. Lo que os digo, muy interesante.
Enseguida pensé en hacer unas galletas para acompañar, pero se me presentaba un pequeño problema. Mi suegra no tolera bien la harina de trigo y usa siempre de espelta, y a mi suegro no le conviene el azúcar. Así que me puse a buscar por el mundo blogueril alguna receta de galleta con este tipo de harina hasta que dí con una. Claro que como soy incapaz de seguir una receta al pie de la letra, le he puesto unas avellanas picadas y zumo de limón ya que sin huevo, sin mantequilla, sin azúcar y sin nada de nada pensé que no iban a tener sabor a ná.
Y bueno, algo las he arreglado, pero con lo que a mi me gusta el azúcar y todo lo que suene a calorías, pues qué queréis que os diga, que ojalá no tenga nunca necesidad de prescindir, jejeje. Sinceramente: a mi, no me han gustado demasiado, así de claro os lo digo, aunque mis suegros, que las hice por ellos, me dicen que están buenas. Os dejo ya con la receta.
Ingredientes
300 gr de harina de espelta
2 cucharadas de aceite de oliva
150 ml de leche de soja
1 cucharada de bicarbonato
50 gr de avellanas picadas
El zumo de 1 limón
Elaboración
Hacer las galletas es bien sencillo. En un bol junta todos los ingredientes hasta hacer una masa dura. Precalienta el horno a 180º. Ponemos papel de hornear en la bandeja del horno.
Estiramos la masa con un rodillo hasta un grosor de 6 mm más o menos. Vamos cortando las galletas con nuestro molde preferido y las vamos poniendo en la bandeja. Con estas cantidades os dará para 2 bandejas llenas. Cuando las veáis doraditas las sacáis que ya estarán listas.
¡A disfrutar con un buen café!