En esta ocasión os traigo una receta para inútiles con los postres (como yo), una receta donde lo difícil es poner los ingredientes en un bol y amasarlos.
Yo he sido más vago y he utilizado una máquina de amasar para no mancharme las manos, pero la verdad es que se puede amasar con las manos y quedara de muerte.
La idea de esta receta la he sacado de la web "Hogar útil" en su receta "Galletas de jengibre y canela para Navidad."
Ingredientes (30-35 galletas):
250 g de harina tamizada (pasada por un colador)
150 g de mantequilla
100 g de azúcar
1 cucharada de café colmada de bicarbonato
1 cucharada de café colmada de canela
1 cucharada de café colmada de jengibre en polvo
1 cucharada de café colmada de jengibre fresco recién rallado
1 huevo
Sal
Azúcar glas
Elementos para decorar (opcional)
Para decorar podéis no usar nada, o lo que tengáis perdido por vuestro armario, yo he utilizado fruta escarchada, cerezas confitadas, escamas de chocolate y estrellitas de azúcar de colores, pero todo esto es opcional.
Preparación:
La preparación de esta receta es facilísima.
Introducimos en un recipiente, lo suficientemente grande, como para poder trabajar la totalidad de los ingredientes, con facilidad y colocamos en el recipiente la harina, el azúcar, la canela, el bicarbonato, los dos jengibres y un toke de sal.
Damos un golpe de microondas a la mantequilla (alrededor de un minuto) y agregamos al recipiente donde tenemos el resto de los ingredientes.
Batimos un huevo y lo agregamos también al resto de los ingredientes.
Amasamos bien todos los ingredientes y dejamos reposar media horita como mínimo para que se integren bien todos los ingredientes.
Amasamos de nuevo y estiramos la masa con el rodillo.
Con la ayuda de un corta pastas damos la forma deseada a las galletas, decorándolas con lo que tengamos perdido por la cocina (chocolate, cerezas, etc).
Horneamos alrededor de 30 minutos a 150 grados.
Decoramos rociándolas con azúcar glass.
Dejamos enfriar y guardamos en un bote hermético.