Ingredientes:
200 gr de mantequilla pomada,
200 gr de azúcar en polvo,
400 gr de harina de repostería,
1 huevo,
esencia del sabor que prefieras (es opcional, la de vainilla es la que mejor queda y siempre da un toque especial, sin pasarse)
Pasos:
Bate la mantequilla en pomada hasta que blanquee y añade el azúcar sin dejar de batir.
Incorpora el huevo y sigue batiendo hasta integrar. Después vamos a añadir la harina (poco a poco, para que no se formen grumos) y si quieres la esencia que elijas, mezcla bien y obtendrás una mezcla no pegajosa.
Podrás estirar la mezcla sobre una superficie enharinada (yo personalmente prefiero coger trocitos, haces bolitas y las aplastas con las manos, quedan redonditas y diferentes unas de otras, (ideales para hacer con niños).
Hornea con el horno precalentado a 180º durante 10-12 minutos, están listas cuando comienzan a dorarse los bordes, la diferencia entre una galleta dura y una crujiente es de tan solo un minuto así que vigílalas bien (algunos me han preguntado por qué las galletas quedan duras como piedras, esta es una de las razones, aunque veáis que están blandas al sacarlas, no os preocupéis que ya se endurecen al ratito).
¡Qué disfrutéis!
¡Qué aproveche! Smacznego! Bon appétit! Enjoy it!