Como son tan bonitas y todo el mundo dice que da pena comerlas (aunque os aseguró que las probé y están buenísimas), he decidido regalarlas y así darle forma a una idea que hace tiempo que me ronda por la cabeza....
Hice estas bolsitas a mano y las he regalado y de tanto que han gustado ya me han hecho un encargo para unas bodas de plata!
Una de las afortunadas es Cristina de Sweet Bohème. En Sweet Bohème hacen coronas de flores a mano y con mucho amor! Son preciosas y quedan muy bien, me encantan!
¿Qué tal una corona para una boda y unas galletitas de recuerdo para los invitados?