El gofio es harina tostada y posteriormente molida, sobretodo de trigo y maíz, aunque últimamente se le ha agregado otras especies de cereales y legumbres. Según el tueste y cereal utilizado puede variar su color y sabor. Su color es un poco más oscuro que la harina, aunque como he dicho antes, depende también de qué esté compuesto, pero para que os hagáis una idea.
El gofio se ha utilizado desde hace muchísmos años, ya los guanches (aborígenes canarios) lo usaban como alimento básico junto con la leche de cabra. Lo molían en cuencos de piedra y tostaban sus granos sobre arena negra caliente. Solían amasarlo en zurrones (piel de cabrito). Tanto durante la conquista de América como para los emigrantes Canarios, fué alimento básico, utilizado en sus largas travesías hasta mitad del siglo XX.
En la actualidad sigue siendo un producto básico de la gastronomía típica Canaria, siendo uno de los productos más utilizados en los platos típicos isleños. Su elaboración ha ido evolucionando en molinos artesanales, tostados a mano, donde aún siguen en muchos lugares fabricándose como antaño
(Texto mío extraído de una página de opiniones en la que suelo escribir)