“La comida es uno de los placeres más importantes en la vida. Todos comemos, muchos lo gozamos y, a algunos, nos encanta cocinar“
Sobre todo en éstos últimos dos meses y unos cuantos días más, la cocina se ha puesto aún más de moda si cabe en la red, el “confinamiento” ha dado lugar a cientos de videos recetas y han vuelto a hervir los fogones de la mano de blogueros, que hasta entonces, mantenían sus cocinas virtuales, blogs o webs más o menos apagados dando lugar a que a las redes sociales y los caminos virtuales vuelvan con más sabor y aromas especias, ingredientes, secretos culinarios y platos.
Grandes chefs y blogueros gastronómicos, también aficionados al mundo de los fogones han dado el salto a internet, han vuelto con más fuerza que nunca: ¡¡ En la red se ha vuelto a cocinar, aún se cuece la gastronomía !! Los escenarios se han multiplicado, hemos entrado en sus cocinas y se guisa al otro lado de la pantalla. Han compartido con millones de usuarios recetas, recomendaciones y sensaciones culinarias, todos con un nexo común: la pasión por la cocina.
Personalmente me cuesta dar ése salto, no tengo la opción, quizás ni la paciencia necesaria, para poder grabar mientras cocino y muchísimo menos editar los videos. Es mi gran asignatura pendiente, así que me limito a lo que he venido realizando desde principios del año 2009, seguir humildemente publicando mi blog, “Mi Cocina”con asiduidad, con calma y adaptándome dentro de mis posibilidades a las circunstancias que me rodean. Y a veces, en alguna ocasión, he de reconocer que se me pasa la idea de “tirar la toalla”, dejarla aparcada a un lado durante un tiempo, descansar en una palabra.
Abrir un blog es muy fácil, crear contenido, cocinar, realizar fotos, publicar durante tantos años con continuidad y constancia no es una tarea fácil, máxime que no lo tomo como una obligación, como si de un trabajo se tratara, es sólo y nada menos que una distracción que me aporta aprendizaje, cultura gastronómica, grandes amigos y sobre todo muchísimas satisfacciones personales.
Un comentario, un “lo he hecho” y nos ha encantado, no dejes de publicar, me traes los recuerdos de mi niñez, son los platos que preparaba mi madre, he recuperado ésta o aquella receta que tenía olvidada o no sabía cómo hacerlaPalabras de ánimo que me siguen motivando a continuar con “Mi Cocina”.
Entre ése tipo de “regalos” y de ánimos, también de amigos que llego a conocer están Manuel y Maria José, propietarios de una gran empresa malagueña: Malmurfusión Selección Gourmet.
Hace unos días tuvieron un hermoso detalle que me llegó a emocionar:
Suena el teléfono y escucho su voz: Hola Toñi ¿Estás en casa? Voy a llevarte algo. Sí, #YoMeQuedoEnCasa puedes llegarte cuando quieras, pero ya sabes, con “mascarilla”, igual ni me reconoces, con media cara tapada y éstos pelos.
No pudo pasar del porche, pero sí que llegaron a mi corazón, ya que no sólo hay que alimentar el cuerpo, y ellos con los productos que distribuyen de alta gastronomía lo hacen a la perfección, también hay que alimentar el espíritu.
No sólo hicieron llegar excelentes productos a mi cocina, sino el hecho de que en uno de los más emblemáticos de su empresa, las anchoas del Cantábrico, realizaron una edición especial con mi imagen, haciéndome sentir “embajadora” de éste gran producto de la mar.
Así lo contaban en las redes sociales.un gran honor, todo un gran regalo
Hoy hemos querido darle una sorpresa a Toñi, hemos querido nombrarla “embajadora de Malmurfusion Selección Gourmet "Las recetas de toda la vida, de su casa a la nuestra"
Su pasión por la gastronomía tiene su punto de sal, su aroma y los condimentos necesarios para estar día a día detrás de un blog gastronómico. Su trayectoria en nuestra gastronomía le ha llevado a ser la “madre de muchos cocineros”. Esperamos que siga con tantas ganas de ponerse el el mandil y que la vida la recompense con los mejores sabores personales. Gracias por tener ése puntito de sal.
Gracias Manuel, gracias Maria Josépor personas como vosotros, apasionadas de la gastronomía, por nuestra querida Málaga, seguidoras de "Mi Cocina", hace que merezca la pena publicar ésta cocina virtual, éste blog, compartir lo que se cuece en mis fogones.
Hoy, he realizado una receta marenga con uno de vuestros productos. La receta hacia mucho, mucho tiempo que no la preparaba, tuve la suerte de que me la hizo recordar hace unos días mi admirada Alicia, una gran bloguera a quien sigo, cuyo blog tiene un especial "Olor a Hierbabuena"
Antaño se preparaba ésta receta marenga con las tiras de pimientos morrones asados cuya tradición malagueña yo sigo realizando exactamente igual, pero en ésta ocasión, para éste “guisaillo” de pez espada con pimiento asado he utilizado “pimientos asados a la leña” en conserva de mis queridos amigos de
"Malmurfusión Selección Gourmet "
(Datos de contacto: gerencia@malmurfusion.com Tfno. (+34 670958957)
¿CÓMO LO HICE?
INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS:
250 grms. de ventresca de pez espada, un trozo de espina de pez espada, 100 grms. de almejas, 6 gambas blancas grandes, 6 tiras de pimientos morrones asados al horno de leña, media cabeza de ajos, 2 hojas de laurel, aceite de oliva virgen extra, 5 hebras de azafrán, un vaso mediano de vino blanco, dos vasos de agua, seis granos de pimienta negra, dos hojas de laurel, un pimiento chile pequeño y sal.
Nota.- La espina central del pez espada hay que pedírsela al pescadero. Yo siempre suelo comprar el pez espada a mi pescadero de confianza del Mercado de Huelin, Salvador y Paco.
LOS PASOS A SEGUIR:
Partir la cabeza de ajo por la mitad, dejar las almejas sumergidas en agua con sal a fin de que suelten la posible arena que puedan traer en su interior y cortar el pez espada en trozos pequeños (como de un bocado). Reservar.
En una cacerola echar aceite de oliva virgen extra de forma que cubra el fondo.
Colocarla al fuego y una vez el aceite esté caliente echar la cabeza de ajos, los trozos de pimiento asado y la espina del pez espada, dejándola freir hasta que cojan un bonito color dorado por todos lados, con cuidado de que no se rompa la cabeza de ajos.
Incorporar el vaso de vino y llevar a ebullición durante dos o tres minutos a fin de que se evapore el alcohol. Añadir los dos vasos de agua, el azafrán y dejar cocer quince minutos hasta que reduzca el caldo.
Colarlo y pasarlo a una sartén amplia. Colocar la cabeza de ajos junto con el caldo y ponerla al fuego, echar las hojas de laurel, la pimienta negra, el pimiento chile y salar al gusto.
A media cochura incorporarlos trozos de pez espada, las almejas y las gambas, dejando cocer unos cinco minutos, dar la vuelta a las gambas y una vez que estén abiertas las almejas retirar del fuego y servir.
Personalmente me gusta colocar la sartén en el centro de la mesa y servir en ella a cada comensal.
Consejo: Si se realiza como plato único, o primer plato, acompañar con patatas fritas. ¡¡ Buen provecho !!