Como sabréis, en Granada se celebra el 3 de Mayo la festividad del día de la cruz, una fiesta de origen pagano que se cristianizó y que paradójicamente hoy en día ha dejado de formar parte de la liturgia cristiana.
Originalmente se trataba de una celebración romana que ensalzaba la llegada de la primavera, y en ella se decoraba un árbol, o un totem con flores y otros adornos, y se rendía culto a la naturaleza. La llegada del cristianismo, cambió el totem por una cruz, y aunque ya no se considere una festividad cristiana, la simbología de la cruz se ha mantenido.
En Granada, además de las decoraciones también hay platos gastronómicos típicos de este día como las habas con jamón o bacalao, las salaillas, los embutidos.
Para celebrar este día, hemos decidido llenar El Caldero de habas y presentaros esta receta de habas con jamón y huevos fritos que quita “el sentío”.
Os recuerdo que en el blog teníamos ya una receta parecida, pero mucho más ligera ya que los huevos eran escalfados. Podéis verla aquí.
Ingredientes: (para 2 personas)
3 kilos de habas en vaina, (Podéis usar enlatadas, pero entonces ¡necesitareis mucho menos!)
3 cebolletas
1 cabeza de ajos
2 lonchas de jamón serrano ibérico
1/2 vaso de vino de cocina
1/2 vaso de agua
sal
1 cucharadita de azúcar
aceite de oliva
tomillo
pimienta
2 huevos camperos
Elaboración:
Esta receta es super sencilla de hacer, pero teneis que tener en cuenta que desgranar 3 kilos de habas ¡lleva un buen rato! Y eso es lo primero que tenemos que hacer. Se puede hacer en otro momento previo a la elaboración de la receta, (el día anterior, por ejemplo) de manera que el tiempo de preparación se reduzca considerablemente.
Cuando estemos listos para empezar a cocinar, pelamos todos los dientes de ajo y los laminamos en rodajas algo gruesas. Arreglamos también la cebolleta y la cortamos en tiras.
En una olla lo suficientemente grande como para que quepan todas las habas, ponemos 4 cucharadas de aceite de oliva y sofreimos los ajos hasta que empiecen a dorarse.
Incorporamos entonces la cebolleta y salteamos hasta que esté tierna, momento en el que añadimos también las habas. Salteamos un par de minutos removiendo constantemente.
Regamos ahora el guiso en el medio vaso de vino de cocina. Cocinamos un par de minutos y añadimos el medio vaso de agua.
A continuación espolvoreamos por encima el tomillo, la sal y pimienta al gusto. Tapamos y dejamos cocinar a fuego lento durante unos 10 minutos, o hasta que las habas estén tiernas.
Pasado ese tiempo, destapamos, añadimos una cucharadita de azúcar y removemos bien. Subimos el fuego un poquito, y dejamos cocinar destapado otro par de minutos. Mientras tanto, cortamos el jamón en daditos.
Incorporamos el jamón a la olla y removemos bien. Bajamos de nuevo el fuego y dejamos que reduzca el caldo del guiso.
Mientras tanto, en una sartén pequeña ponemos los huevos a freír en aceite de oliva y los cocinamos a nuestro gusto. (Para mí es imprescindible que la yema luego se pueda mojar :)) ¡Y ya tenemos listas nuestras habas del día de la cruz!
Si tenéis la oportunidad de comer este plato con una salailla, es lo suyo. Pero si no, una buena barra de pan, una cervecita fresquita, ¡y a disfrutar!
¡Que aproveche, Calderer@s!
Habas con jamón y huevos fritos
Habas con jamón y huevos fritos
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