Junto al agua negra. Olor de mar y jazmines. Noche malagueña (Antonio Machado)
El aroma de los jazmines inunda mi vida en los calurosos meses veraniegos, todas las casas de alrededor, incluida la mia se ven tapizadas tanto sus porches, como vallas y ventanas de esas pequeñas flores blancas que nos embriagan con su turbadora fragancia.
En los atardeceres malagueños, mi hogar, "Mi cocina" huele a jazmines.
Dicen que si le elegancia fuera el perfume de una flor, ésta sería sin duda la del jazmín, una de las señas de identidad de Málaga. El olor de las biznagas es el olor de las noches malagueñas.
Hay que recurrir al Vocabulario Popular Malagueño escrito por Juan Cepas para ver la definición de “biznaga” que dice: Biznaga, adorno floral que se prepara insertando jazmines sobre el tallo múltiple y seco del cardo. En Málaga es corriente su venta callejera llevándolos pinchados sobre una penca (hoja de una chumbera) que sirve de soporte. La figura del biznaguero ha sido recogida en las artes tanto plásticas como literarias, y aún se les puede encontrar por las calles de Málaga vestidos de marengo dejando a su paso el delicado perfume.
Aunque la palabra biznaga, proviene del mozárabe “bisnaga” y es una planta de la familia de las umbelíferas que una vez seca y limpia de sus flores y bien recortadita sirve como armazón para ensartar los capullitos antes de que se abran al anochecer.
Recuerdo a mi madre con aguja e hilo en mano como cosía los jazmines, preparando una diadema que colocaba alrededor de su “coco”, o los ya abiertos que introducía en su escote para que su cuerpo se impregnara de su olor.
Sigo sus costumbres, suelo recogerlos y preparar mis biznagas que aunque con un proceso laborioso, es una insignia de las tradiciones malagueñas, que por suerte no se han perdido.
Nunca he hecho helado, no tengo heladera, por lo que a pesar de que tenía especial interés en probarlo desde que lo ví hace un año en el blog de Eva (El fogón de Eva) no me atrevía ha hacerlo.
Esta receta, quisiera dedicarsela a mi amiga Elisa, malagueña al igual que yo y cuyo blog de cocina me encanta y se llama curiosamente: “Olor a jazmín”, por su amabilidad, dulzura y cariñosas palabras que siempre me dedica.
Un postre pensado para su blog, con jazmines de "Mi Cocina".
¿Como lo hice?
Recolectar las flores recién abiertas a ser posible, a la caida de la tarde, enjuagarlas y escurrirlas bien.
Colocarlas en un bol.
En un cazo poner 250 gramos de nata (crema de leche) (usé President, ligera especial para cocinar).
Agregar azucar, unas cuatro cucharadas soperas (probar hasta obtener el dulzor deseado) y llevar a ebullición.
Echar la nata (crema de leche) hirviendo en el cuenco con los jazmines y dejar reposar unas dos horas .
Pasado éste tiempo, colarlo y dejarlo en el congelador unas cinco o seis horas.
Sacarlo y con la batidora a velocidad baja con las varillas (las que se usa para montar claras o natas) se bate a fin de que tome un aspecto cremoso y se evita la creación de hielo.
Meter nuevamente en el con gelador una dos o tres horas y se vuelve a “mantecar” durante dos o tres minutos hasta que esté cremoso.
Introducir nuevamente en el congelador y en unas horas estará listo para consumir.
Adornar con jazmines.
¡¡ Disfruten de los olores y sabores malagueños !!.
La biznaga de "Mi cocina"