El pan es uno de los alimentos que no suelen faltar en los hogares, formando parte de la gastronomía española, y la hogaza es uno de los más típicos y tradicionales de mi tierra, no hay panadería, sobre todo de los pueblos, que no tenga una buena hogaza o fogassa como la llamamos aquí.
En la provincia de Castellón, todos amamos y nos encanta, una buena fogassa de pan casera, sino la has probado, te animo a que intentes hacerla porque es mucho más sencilla de lo que te imaginas, y estoy segura de que cuando la pruebes.....también te enamorarás de ella!!
Hoy estamos a día 11, y este día es cuando publicamos una receta de pan para el reto El pan perfecto, un reto organizado por Marga de Azafranes y canelas, donde nos anima a aprender y perder el miedo a las masas.
Cada mes nos encargamos uno de los participantes de decidir que pan hacemos, y este mes Encarnita me pasó el relevo a mi para que eligiera, y se me ocurrió que hicieran la Hogaza o Fogassa típica de Castellón que publiqué hace un mes.
La fogassa de Castellón, la hice con la receta de Iban Yarza y en la amasadora, ahora, para el reto de hoy, he probado a hacerla en la panificadora....y el resultado me ha encantado, queda espectacular!!
Como siempre dice Iban, el mejor ingrediente para hacer un buen pan, y en este caso, una buena hogaza.....es el tiempo!!
Para el poolish o masa madre:
100g. de harina panificable.(la harina de trigo normal)
60g. de agua.
5g. de levadura fresca.
Para la masa final:
160g. de masa madre.
500g. de harina panificable.
340g. de agua.
12g. de sal.
Modo de hacerlo:
La masa madre: (la noche anterior)
Disuelve la levadura en el agua tibia, no caliente.
Pon en un bol la harina y añade el agua con la levadura.
Mezcla hasta obtener una masa firme, haz una bola y tapa el bol con papel film.
Deja que fermente durante unas 12 horas por encima de 20º, mejor si es cerca de los 25º.
La masa final:
Coloca en la cubeta de la panificadora la masa madre del día anterior.
Añade el agua y luego la harina y la sal.
Pon el programa de amasado en la panificadora, el número 6 en la mía y deja que trabaje durante 1 hora y 50 minutos.
Durante este programa se producen amasados y levados, cuando termina el programa, la masa estará suave y lisa.
Saca la masa de la cubeta y quita los ganchos, pon un poco de harina en la encimera y bolea dando forma redonda con suavidad para no desgasificar demasiado, ya que una de las claves es que hay que respetar la estructura interna del pan que se ha conseguido.
Pasa la bola de masa encima de papel de horno enharinado y ponla sobre la bandeja del horno apagado para que fermente 1 hora más.
Cuando haya vuelto a levar, baja la masa de hogaza apretando suavemente con las manos y deja que fermente otra hora más.
Coge un poco de harina con las manos y pásala por encima de la masa, así cuando esté cocida quedará más rústica.
Haz unos cortes con una cuchilla bien afilada en forma de rectángulo.
Precalienta el horno a 230º con calor arriba y abajo y pon una bandeja metálica en la base del horno.
Pon la hogaza en el horno y echa en la bandeja metálica agua caliente al comenzar la cocción para generar vapor. Pasados 15 minutos, quita la bandeja con agua y continúa otros 45 minutos a 200º hasta completar 1 hora de horno.
Saca con cuidado la hogaza del horno y deja que se enfríe sobre una rejilla.
Espero que te guste.