King cake

El king cake (o pastel rey) es un bollo en forma de rosca, muy parecido a nuestro roscón de reyes, que se consume en Nueva Orleans para celebrar el Mardi Gras (traducido como Martes Graso) que no es otro que el que aquí conocemos como martes de carnaval, víspera de que comience el periodo de cuaresma con el miércoles de ceniza.
Además de los numerosos desfiles de carnaval que abarrotan las calles de Nueva Orleans durante ese día, los escaparates de las pastelería se llenan de los colores de estos bollos típicos.

Se dice que el origen de este bollo es francés y que estaría inspirado en la famosa Galette des Rois (Galleta de reyes, que es típica comer el día de reyes en Francia). 

En cuanto a sus colores amarillo, morado y verde, se dice que se deben a los tres colores que representan a los Reyes Magos y que vendrían a significar: Justicia (morado), Fe (verde) y Poder (amarillo). Otros dicen que son, simplemente, los colores representativos del Mardi Gras.



Y después de ponernos un poco en situación, vamos con la receta. Se trata de un bollo con una miga suave al que se le suele rellenar de canela y se prepara en forma de rollo al que después se le da forma de rosca. Es sencillo de preparar pero debéis tener en cuenta que lleva su tiempo. Se elabora a partir de una masa que necesita dos levados por lo que os recomiendo tener paciencia y respetar los tiempos. Sólo así obtendréis un buen resultado.

Es un bollo que admite muchos rellenos. El relleno tradicional es a base de canela, mantequilla y frutas secas (ciruelas, pasas, nueces). Pero podéis ponerle chocolate, dulce de leche, leche condensada, y en general todo tipo de rellenos que aguanten el horneado. En este caso no nos valdrían la nata (crema de leche) ni las cremas pasteleras porque se nos estropearían en el horno.

El relleno que he elegido es chocolate y he seguido la manera tradicional de hacerlo sustituyendo la canela en polvo por cacao puro en polvo.

Y esta es la propuesta para comenzar el año de Desafío en la Cocina, perfecta para este periodo en que estamos a medio camino entre la pasada festividad de los reyes magos y la próxima celebración de los carnavales.

Para la masa:

- 1 huevo M

- 2 yogures griegos

- 500 gr. de harina

- 70 gr. de azúcar

- 7 gr. de levadura seca de panadería

- 30 gr. de mantequilla

- una pizca de sal

- 60 ml de leche-

Para el relleno:

- 2 cucharadas soperas de cacao puro en polvo.

- 1 cucharada sopera de azúcar.

- 2 cucharadas soperas de mantequilla.

Para la glasa:

- 30 ml. de leche

- 100 gr. de azúcar

Para el azúcar de colores:

- Colorantes de uso alimenticio: verde, amarillo y morado. 

- Azúcar (tanta cantidad como queramos poner sobre el king cake)



En primer lugar, templaremos la leche en el microondas y disolveremos en ella la levadura seca. Por otro lado, batiremos el huevo y lo mezclaremos con los dos yogures, el azúcar, la mantequilla (previamente derretida), la sal y la mezcla de levadura y leche. Mezclaremos hasta obtener una masa líquida a la que iremos incorporando la harina poco a poco. Llegará un punto en que tengamos que utilizar nuestras manos para terminar de incorporar la harina. Amasaremos hasta obtener una masa consistente y homogénea. Haremos una bola a la masa y la pondremos en lugar templado durante una hora y media aproximadamente. En ese tiempo notaremos como la masa aumenta su volumen.

Transcurrido ese tiempo volveremos a amasar la masa. En una superficie limpia la estiraremos con la ayuda de un rodillo hasta formar un rectángulo.

El relleno es fácil de preparar. Derretiremos la mantequilla y en ella diluiremos el cacao en polvo y el azúcar. Removeremos con una cucharita y los extenderemos sobre el rectángulo de masa con la ayuda de una brocha de silicona. Una vez cubierta toda la superficie de la masa, la enrollaremos sobre sí misma como si de un brazo gitano se tratase.



Cuando la tengamos enrollada del todo tendremos un cilindro alargado al que daremos forma de rosca uniendo sus dos extremos. Para ello, presionaremos los dos extremos y uniremos de forma que no se nos abra después en el horno.

Pondremos la rosca que hemos formado sobre la bandeja del horno forrada con papel vegetal y en el centro de la rosca, si queréis (es opcional), podéis poner un tazón para que con el levado y posterior horneado no se cierre el agujero.

Dejaremos que la rosca leve hasta que doble su volumen. Es recomendable hacerlo en lugar templado. El tiempo aproximado que tardará en doblar su volumen es de dos horas, pero puede ser más o menos dependiendo de nuestra masa, de la levadura utilizada, de la temperatura, y de otros factores.

Cuando haya doblado su volumen, precalentaremos el horno a 180º C y meteremos la rosca durante 20 minutos aproximadamente. Si veis que se dora demasiado, cubridlo con papel de aluminio y continuad la cocción un poco más.

Una vez esté horneado el king cake lo dejaremos enfriar sobre una rejilla.

En el caso de que le hayáis puesto el tazón en medio, no se lo quitéis hasta que el king cake se haya enfriado. De lo contrario, corréis el riesgo de que se os rompa.

Para preparar el glaseado mezclaremos la leche y el azúcar en un vaso con la ayuda de una cuchara. No tiene más. A mí me gusta que quede espeso, así que podéis ponerle un poco más de azúcar.

Colorear el azúcar es muy sencillo. Necesitaremos tres tarros con tapa o tres vasos y tres cucharas diferentes. Una para cada color.

Pondremos el azúcar en los recipientes y a cada uno le añadiremos una gota del color que queramos hacer. En este caso, en un recipiente pondremos una gota amarilla, en otro una gota verde y en otro una gota de morado. Si lo hacéis en un tarro, cerrad la tapa y agitar. Si lo hacéis en vaso, remover con una cuchara hasta obtener el color. Para conseguir colores más intensos podéis poner una gota más de colorante.

A tener en cuenta:

- Prácticamente, en todos los supermercados venden colorante líquidos para repostería. Habitualmente los encontraréis en un pack con los colores amarillo, azul y rojo. Mezclando estos colores podemos conseguir el resto:

Azul+ Amarillo= Verde

Rojo+ Azul= Morado

No obstante, en tiendas especializadas de repostería venden todos los colores y en diversos tipos de colorantes: líquidos, en gel, polvo. En este caso, os servirán tanto los colorantes líquidos como en gel. Los colorantes en polvo son para otro tipo de preparaciones.



Os invito, como siempre, a que no os perdáis todos los Kings Cakes que mis compañeras de Desafío en la Cocina han preparado para esta ocasión. Estoy segura que habrá muchas formas diferentes de prepararlos según sus formas, sus rellenos y sus coberturas.