Como lo prometido en Facebook es deuda. aquí está la receta del kringle de queso y nueces.
Es una receta que ya había hecho antes pero que no puse en el blog porque no me dio tiempo de hacer las fotos.
La otra vez la hice dulce (sus orígenes son con canela y azúcar moreno y se llama kringle estonia) pero, para no repetirla en casa, esta es saladita.
Mi "tropa" estaba mirando cómo hacía las fotos poniendo cara de... ¿Ya has terminado? ¿Nos la podemos comer ya?
¡Da gusto ver que lo que haces con cariño y tiempo sirve para que después lo disfruten los demás! ¿Verdad?
Viendo las estrías que tiene parece complicado de hacer pero...¡Para nada! Lee la receta hasta el final y verás lo sencillo que es. Lo único que tienes que tener es un poquito de paciencia para dejar levar la masa pero, por lo demás... ¡Sencillísimo!
Si prefieres la versión dulce, en vez de queso y nueces la puedes rellenar de Nocilla, Crema de cacahuetes (la hay con trocitos. Está deliciosa y le da un punto crujiente al kringle), mermelada o cualquier otro relleno que se te ocurra y que puedas untar.
Yo no lo he hecho pero, si quieres, puedes decorarla. Si la preparas dulce le puedes poner una glasa o una crema de chocolate, etc. por encima. Si la preparas salada, una buena idea es decorarla con crema de queso cheddar.
¡En fin! Cada uno puede variar la versión y los ingredientes del relleno a su gusto. Es muy versatil y queda una masa un poco crujiente por fuera y como un poco de bizcocho por dentro.
Ingredientes:
Masa
30 gr. de azúcar blanca
120 gr. de leche entera
30 gramos de mantequilla sin sal
15 gr. de levadura fresca prensada. Yo uso esta
1 yema de huevo
300 gr. de harina de fuerza
1 pellizco de sal
Relleno:
200 gr. de queso azul
1 tarrina queso untar (Tipo Philadelphia)
40 gr.Nueces
1 pizca de pimienta negra molida
Preparación:
Poner a templar la leche con la mantequilla y la levadura. Mezclar hasta que se disuelva bien la levadura y la mantequilla. Apartar del fuego. Añadimos la yema de huevo. Mezclar. Echar la harina y la sal. Volver a mezclar. Amasar 3 minutos hasta obtener una masa que se despegue de las paredes de la cacerola. Tapar y dejar leudar aproximadamente 1 hora y media (hasta que la masa doble su tamaño).
Una vez que la masa haya doblado su tamaño, poner el horno a precalentar a 170 ºC. Depositar la masa en una superficie enharinada y estirar con el rodillo hasta que quede un rectángulo de grosor bien fino.
Untar la tarrina de queso, repartir por encima, a trocitos pequeños, el queso azul y las nueces hechas trozos.
Enrollar la masa por la parte más ancha apretando bien las vueltas porque, cuantas más vueltas puedas hacer, más estrias quedarán después y más bonita se verá la rosca. Una vez bien enrollado hacer un corte, con con un cuchillo bien afilado, a lo largo, sin terminar de cortar uno de los extremos.
Trenzar los dos cabos procurando que el corte con las estrias queden hacia arriba.
Si quieres ver unas fotos de cómo hacerlo, pincha en este enlace y verás qué fácil resulta.
Enharinar una fuente de horno y poner la rosca enrollada sobre ella. Pincelar con huevo batido y meter en el horno precalentado a 170ºC durante 25 a 30 minutos revisando de vez en cuando para que no se queme.
Os aseguro que esta receta, si tenéis un poquito de paciencia para esperar a que leve la masa, la vais a repetir en más ocasiones porque, tanto en su versión dulce como en la salada, es vistosa y queda muy bien si tenéis invitados.
Espero que la hagáis y me digáis si os ha gustado.