Esta receta es ésas que descubres comiendo por ahí, y te gusta tanto que la intentas hacer en casa. No sé si me sale clavada, pero el resultado me gusta muchísimo también, así que se ha quedado formando parte de las cenas de casa. La clave es hacer una tempura espesa para que se quede pegada a la merluza, y freírla con el aceite bien caliente ( pero que no humee!), para que la cubierta esté súper crujiente, sin exceso de grasa y contraste con la suavidad del interior que tiene la merluza. En cuanto le cojas el puntito a la fritura, verás que delicia ;)
En el restaurante donde descubrí esta merluza en tempura de cerveza, me la pusieron acompañada de una mayonesa de curry absolutamente deliciosa. Yo también tengo mi versión particular, y te recomiendo muy mucho que la pruebes.
No me enrollo más, y te dejo las indicaciones para que hagas la merluza en tempura de cerveza ;)
INGREDIENTES (PARA 6 PERSONAS)
– 800 gramos de lomos de merluza con piel, y sin espinas ni escamas
– 200 gramos de harina de trigo
– 260 gramos de cerveza muy fría.
– sal y pimienta
Te dejo los ingredientes que he pesado para hacer el post, siempre lo hago a ojo. Voy añadiendo harina y cerveza hasta que obtengo una masa de consistencia de papilla espesa.
ELABORACIÓN
1. Salpimenta los lomos de merluza.
2. Prepara la tempura. Pon en un bol la harina y la cerveza, y bátelo con un tenedor. Verás que queda una masa espesa, no te preocupes por los grumos, no se notarán al freir.
3. Corta la merluza en trozos de un tamaño de unos dos dedos de ancho por dos dedos de largos. A tu gusto. Yo lo hago con unas tijeras de cocina para no destrozar el pescado.
3. Introduce los trozos de merluza en la tempura.
4. Prepara un cazo con aceite de oliva virgen extra y ponlo al fuego hasta que esté bien caliente, entonces ve echando los trozos de pescado bien cubiertos de tempura.
5. Ve friendo por tandas toda la merluza. Verás que al echarla al aceite se hincha un poco el rebozado, es así. Ten paciencia porque les cuesta un ratito freirse, verás que tarda en coger un ligero dorado. Cuando tenga color por un lado, dales la vuelta.
6. Saca el pescado frito sobre papel de cocina para que absorba el exceso de aceite de la fritura.
7. Sirve inmediatamente!!! Este punto es fundamental, recién hecho está crujiente a tope, si lo dejas un rato, se irán ablandando, y están ricos, pero no tanto :)
Puedes acompañar la merluza con una ensalada, y ya tendrás una cena completa. La que ves en la foto está hecha a base de brotes de espinaca, frambuesas y un puñado de pipas peladas. La aliño con un chorro de limón y aceite de oliva virgen extra, el limón le va genial a la espinaca. Otra versión que me pirra para ensalada de brotes es con parmesano, unos trocillos de bacon a la plancha y champiñones crudos. Con el mismo aliño de limón. Queda muy buena.
Si quieres una ensalada más completa, puedes mirar la receta de la ensalada César, o la ensalada de quinoa y salmón.
PARA LA MAYONESA DE CURRY
– 2 cucharadas grandes de mayonesa de bote
– 2 cucharaditas de postre de curry
Mezcla bien, y deja reposar 5 minutos. Prueba para ver si está a tu gusto.
Un apunte en cuanto a la merluza, la compro congelada por evitar tenerla que volver a congelar en casa para evitar riesgos con el anisakis. He probado unas cuantas, y la que más me gusta es la de Mercadona. No tiene ni una espina ni media, y no lleva escamas, por lo que resulta perfecto para esta receta en la que los trozos son de bocado, y es fundamental no encontrarte sorpresas…y más si hay niños en la mesa.
Bueno pues hasta aquí la receta de hoy, anímate a probarla y te emplazo al jueves, habrá nuevo post!!
¡Buen provecho!!
.