Me oirás quejarme y bastante de la lluvia eso sí, pero ya sabes que aquí llueve mucho y lo hace en cualquier momento del año.
En Inglaterra, vivíamos en un pueblecito con mucho encanto, a las afueras de una ciudad muy fea, inventada (si, inventada) hace 4 o 5 décadas, llamada Milton Keynes. Para ser exactos, estábamos a apenas un par de kilómetros del lugar del mapa más alejado de la costa y en la que (ironía inglesa 100%) celebraban anualmente el Oyster Festival (festival de la ostra).
Cada vez que pienso en aquellos otoños ingleses, recuerdo con cierta nostalgia los Tea Rooms en los que podías disfrutar de un té con un buen trozo de tarta o un scone, los pubs con sus típicos Sunday Roasts, los pueblitos pintorescos y sus casas con tejados de paja, los bosques y campos ondulantes por los que salir a pasear viendo zorros, ardillas, ciervos?, las mansiones señoriales, y sus personajes peculiares con historias increíbles que contar…
Pero también recuerdo los días, semanas y casi meses, grises, húmedos, oscuros…
Ya sabemos que esto no es el trópico, pero aquí, el otoño nos trae unos anocheceres naranjas preciosos, como pintados al óleo…, nos trae paseos con abrigo por la playa, reuniones familiares, café con amigos?
Aquí el otoño huele a castañas asadas, a carne guisada, a chocolate con churros, a manzana asada con canela?
Y por que no, aquí y en donde sea, el otoño tambien huele a calabaza asada con especias?
TIEMPO DE ELABORACIÓN
45 min de horneado + 10 minutos de cocción
INGREDIENTES
1 calabaza potimarrón de 1,350 kg
1 cucharadita de mezcla de especias (canela, jengibre, clavo, nuez moscada y pimienta de Jamaica)
600 gr de azúcar con pectina (especial para mermeladas)
4 cucharadas de zumo de limón exprimido
UTENSILIOS
Fuente apta para el horno
Cazuela
Embudo
Batidora o robot de cocina
2 Tarros de cristal de 325 ml
Exprimidor
ELABORACIÓN
Precalienta el horno a 180 grados.
Trocea la calabaza sin pelar. Con una cuchara, retira las semillas y los filamentos del interior de la calabaza.
Hornea la calabaza durante 45 minutos.
Deja enfriar lo suficiente para poder manipular los trozos de calabaza con comodidad.
Pela la calabaza asada y tritúrala junto con una cucharadita de la mezcla de especias y el zumo de limón.
Vierte el puré en una cazuela. Añade el azúcar. Lleva a ebullición y cuece durante 10 minutos a fuego medio alto, removiendo para evitar que se te queme la mermelada. Si utilizas azúcar sin pectina, tendrás que cocer la mermelada durante 20-25 minutos.
NOTAS
Respecto a la mezcla de especias y, sabiendo cuanto me gustan, he preparado más cantidad de la necesaria para esta receta. Simplemente he molido una cucharadita de cada especia. La mezcla de especias sobrante, la he guardado en un pequeño tarro de cristal.
Además de sobre una tostada con mantequilla, esta mermelada combina estupendamente con un queso suave de oveja.
La elección de la calabaza no es casual. He usado una variedad que se denomina Potimarron, muy común en los supermercados franceses. Está especialmente deliciosa asada, ya que potencia su sabor dulzón. He probado a hacer esta misma mermelada cociendo la calabaza primero, y te aseguro que su color y su sabor varían notablemente. Si te cuesta encontrarla, puedes probar a utilizar otra variedad llamada Cacahuete (Butternut). Si quieres aprender más cosas sobre las variedades existentes de calabaza, te aconsejo que leas este estupendo post de Virginia de Sweet&Sour, te sacará de dudas.
Respecto al envasado y esterilizado, yo he seguido las instrucciones del fabricante de los tarros: he lavado los tarros, los he dejado secar al aire y los he llenado de mermelada. Después de ponerles la tapa, los he colocado bocabajo durante un par de días. Simplemente, tienes que asegurarte de que los tarros estén bien limpios, las tapas usadas sean nuevas y que el contenido esté bien caliente. El efecto vacío ocurre de manera natural. Tengo que admitir que habiendo crecido viendo a mis Aitonas embotar verduras, atún y otras conservas, este método no me daba ninguna confianza, pero es el que se lleva utilizando en países como el Reino Unido o Francia durante décadas para elaborar mermeladas y a mí no me ha dado problemas en otras ocasiones. Si te quedas más tranquilo esterilizando las conservas cociendo los tarros, aquí te dejo un enlace en el que El Oso con Botas te lo explica estupendamente.
FUENTES
Xabi Likes Chocolate