Hoy vamos a preparar la mermelada de tomate aprovechando que Monsieur Accidents me trajo el fin de semana tomates de una huerta del pueblo. Son unos tomates carnosos con sabor intenso, pero podemos usar tomates tipo pera o cualquier otro que nos guste.
Ingredientes:
1 kg de tomates
1 taza de azúcar
5 clavos
1 ramita de canela
1 pizca de sal
Podemos usar tanto azúcar moreno como azúcar blanca. El azúcar moreno va a darle un tono más oscuro a la mermelada que el azúcar blanca, pero de esta forma destacamos más el potente sabor de los tomates de huerta y las especias.
Como no tenía clavos le he echado media cucharadita de clavo molido.
Preparación:
Lo primero que vamos a hacer es esterilizar los recipientes que utilizaremos para guardar la mermelada y, para ello, los metemos en el lavavajillas en un programa largo a máxima temperatura.
Mi madre esteriliza los recipientes de forma más tradicional, como lo hacía también mi abuela, introduciendo los tarros en una olla con agua que llevamos a ebullición y hervimos durante 10 o 15 minutos. Transcurrido este tiempo los dejamos escurrir bien y esperamos a que se sequen. No debemos tocar el interior de los botes para intentar secarlos.
Una vez tenemos los tarros listos, nos podemos poner con la mermelada, para ello, lavamos los tomates, los secamos con papel de cocina, los pelamos y los cortamos en trozos muy pequeños.
Si no nos gusta ver las pepitas de tomate en la mermelada, ahora es el momento de quitarlas, para ello cortamos cada tomate por la mitad y con ayuda de una cucharita se las quitamos. Tenemos que tener en cuenta que ésto hará que la mermelada tenga menos sabor.
A continuación, ponemos todos los ingredientes en una olla a fuego alto hasta que rompa a hervir, pasándolo posteriormente a fuego medio-bajo. Vamos removiendo continuamente y pasada una hora y media tenemos nuestra mermelada hecha. Se sabe que está lista cuando coge un tono brillante.
Echamos la mermelada en los tarros que previamente hemos preparado y los cerramos muy bien. La mermelada debe de estar hirviendo para que al cerrar se haga el vacío, de esta forma conseguimos hacer que nuestra mermelada se conserve durante más tiempo.
Para asegurarnos que el vacío se hace correctamente, es importante no mover los tarros del sitio hasta que no hayan pasado 24 horas.
El sabor de estos tomates de huerta, el olor tan especial de la mezcla de las especies utilizadas, la potencia del clavo con el dulzor de la canela, hacen de esta mermelada sea muy especial.
La mermelada hará que las tostadas con mantequilla cobren vida en el desayuno. También podemos sustituir la mantequilla por queso de untar.
O podemos usarla para un aperitivo original y sencillo como puede ser un rulo de cabra acompañado de un poco de este preparado.
Bon appétit!!!