Hoy os propongo un dulce que igual sirve para comerlo solo que acompañado de un rico café, té o chocolate caliente. Se trata de unos mini pastelitos de manzana.
Su preparación es muy simple, no hace falta maña culinaria alguna y el resultado es muy vistoso.
Ideales para quedar bien con el invitado más exigente.
Ingredientes:
300 gramos de harina de trigo.
200 gramos de azúcar.
2 huevos L.
200 ml. de leche entera.
200 ml. de aceite. (Variedad a elegir)
1 sobre de levadura química.
La ralladura de un limón.
1 cucharadita de canela molida.
2 manzanas grandes. (Variedad a elegir)
Mermelada de melocotón o albaricoque.
Preparación:
Lavamos las manzanas, secamos bien y cortamos por la mitad.
Retiramos la parte del centro y las semillas y las cortamos en rodajas muy finas.
Batimos enérgicamente los huevos junto con el azúcar.
Añadimos el aceite junto con la ralladura de limón y mezclamos bien hasta que veamos todo integrado.
Tamizamos la harina junto con la levadura y la canela molida y la agregamos poco a poco a la mezcla a la vez que vamos echando la leche. Vamos removiendo hasta que tengamos un mezcla homogénea.
Preparamos unos moldes para magdalenas y los rellenamos con la mezcla hasta la mitad.
Ponemos encima unas rodajas de manzana y metemos en el horno precalentado a 180° grados unos 25 minutos.
El tiempo dependerá de nuestro horno. Podemos comprobar si están hechos pinchando con un palillo o cuchillo. Tiene que salir limpio, si no es así dejamos un poco más.
Una vez terminados de hornear, sacamos y dejamos reposar sobre una rejilla.
Antes de que enfríen del todo los pintaremos con la mermelada de melocotón y si queremos también los podemos espolvorear con un poco de azúcar glass.
Cuando estén completamente fríos ya los tenemos listos para disfrutar.
Y si os hacen falta unos buenos moldes para preparar estos ricos mini pastelitos de manzana no tenéis más que entrar AQUÍ.